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Llegan cambios al carnet por puntos

El viernes 1 de julio de 2005 se inauguró el carnet por puntos, tras 10 años, el balance es más que positivo, aunque quizá no tanto como a Tráfico le gusta apuntar. Por este motivo, el director general de Tráfico, Gregorio Serrano, está dispuesto a cambiarlo.

El carnet por puntos llegó a España hace ya 10 años, si hay que hacer un balance del permiso por puntos, tendría un sobresaliente, aunque como ocurrió en Francia, algunas deficiencias deberán ser corregidas para llegar a la matrícula de honor. El 1 de julio de 2006, AUTO BILD tenía apenas unos meses, quizá por eso muchos aquí recordamos tan bien cómo fueron los primeros meses de su aplicación, todo un lío para muchos que cambió las mentalidades de los conductores españoles por siempre jamás. 

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Y es que, como estudiábamos en la carrera de periodismo, no hay nada que pueda mudar tanto hábitos y comportamientos como sentar un problema en el centro del debate de una sociedad, eso que nos enseñaban como 'agenda-setting' y que es el meollo del carnet por puntos en España. La posibilidad de verse despojados de su permiso de conducir por culpa de perder los puntos preocupó tanto a los conductores españoles que, repentinamente, en el verano de 2006 casi desaparecieron de las autopistas aquellos que no bajaban de 160 km/h en un Valencia-Madrid, entre otras tipologías clásicas de conductores peligrosos. 

Cambios en el carnet por puntos

Sin embargo, 2016 pone fin a 12 años consecutivos de descenso de la mortalidad en carretera: un total de 1.138 personas han muerto en las carreteras españolas en lo que va de año, siete más que en todo 2015. Por eso, el director general de Tráfico, Gregorio Serrano, está dispuesto a cambiar el carnet por puntos. Serrano ha comentado que el actual repunte de la mortalidad obedece a varias razones, entre ellas el aumento de entre un 5 y un 6% del número de desplazamientos motivado por la recuperación económica y otras causas como "el menor uso del cinturón de seguridad", la conducción bajo los efectos del alcohol y de las drogas, o el exceso de velocidad. 

Es cierto que la DGT se plantea tener "un mayor control desde el punto de vista sancionador" y tiene, por tanto, "un camino por recorrer en la concienciación y en la educación". Sin embargo, para esto es necesaria la colaboración de los ciudadanos, así como de los partidos políticos y del sector del tráfico para articular un Pacto de Estado por la Seguridad Vial.

En palabras de Serrano y tal y como recoge El Mundo, los ciudadanos deben ser "conscientes de que si ellos no ponen de su parte, por muchas medidas represivas, legislativas, inteligentes, etcétera, será muy difícil que podamos reducir esas cifras". Pero, ¿cómo ha sido la evolución del carnet por puntos hasta la fecha?

Ramón Ledesma, Subdirector General de Ordenación Normativa en la DGT cuando se estableció el carné por puntos en España recuerda para AUTOBILD.ES “Entre el año 1993 y el año 2003 España asistía lo que podíamos denominar “tarifa plana de mortalidad”. Todos los años fallecían en carretera algo más de 5.000 personas. Con 128 fallecidos por millón de habitantes, estábamos a la cola de Europa en siniestralidad. Las normas existían, pero no se cumplían. Entonces, llegó el permiso por puntos. El sistema trajo una nueva filosofía a nuestra manera de comportarnos en la carretera. Dejamos de correr, dejamos de beber, nos pusimos el casco y nos abrochamos el cinturón de seguridad.”

Ahora, asesor de Pons Seguridad Vial, prosigue:“el permiso por puntos nos ayudó a entender y a respetar la norma. A considerar que la carretera es un espacio común de convivencia y que no podemos hacer todo lo que queramos. Cambiaron los comportamientos, y cambiaron los datos. Y de la década de la tarifa plana de mortalidad pasamos a la década el descenso en siniestralidad. Hasta llegar, en 2013, a 1.700 fallecidos anuales. Un 70% menos cada año. Se han cumplido 10 años del carné por puntos. Es hora de recordarlo. Con agradecimiento, por un parte, pero con crítica por otro, por si existiesen aspectos mejorables que aún pueden permitir salvar más vidas”, 

Desde luego que hay puntos negros en el carné por puntos: un compañero ha podido comprobar los puntos y en la galería está la prueba con su expediente de sanciones, pero otros son incapaces. El inquietante problema C15: “ El usuario no se encuentra registrado como conductor en el sistema" lleva rechazándolos desde que pusieron el sistema de clave/usuario. Las otras posibilidades de consultar tus puntos, todavía más arduas, son con certificado digital o con mecanismo de identificación cl@ve”. Desde luego, no debe ser tan fácil de usar si solo se han descargado esta aplicación unos cuantos conductores.

Y es que, además de los fallos del carné por puntos con certificado digital, la informática no se le da bien a la Administración y durante años se ha producido una descoordinación que ha llevado a cientos de poblaciones a no informar a la DGT de la detracción de puntos, como se conoció bien al tenerse noticia de 11 grandes ciudades donde no te quitan puntos del carné. También se ha dado a menudo el caso de muchas poblaciones que solo informan a Tráfico de los puntos detraídos a final de año, con lo que puede darse la surrealista situación de conductores circulando con un saldo negativo como para perder varios carnés... sin saberlo nadie. 

Aunque de esto no se pueda culpar a Tráfico de eso, sí se le puede echar en cara haber querido sacar demasiado pecho recientemente a cuenta del aniversario del permiso por puntos, con un gráfico mostrando el descenso de muertes en carretera en estos 10 años. Como puedes comprobar en este gráfico sobre el descenso de muertes y el aumento de sanciones desde 2006, al mismo tiempo, se produjo un redoble del esfuerzo sancionador por parte de la DGT. Lo de los Ayuntamientos empobrecidos a partir de la crisis que sembraron de radares sus avenidas es harina de otro costal... En todo caso, insisto en pensar que la trascendencia máxima carnet por puntos hay que buscarla en el cambio de conciencia. 

Gracias a los puntos del carnet en gran parte el debate sobre la Seguridad Vial se colocó en el centro de la sociedad y ahí sigue, aunque a veces sea periférico o directamente cañí, como el fenómeno de quienes compraban y vendían puntos. Seguro que a muchos les ha hecho abrocharse el cinturón, no beber o correr menos. Y eso se dio en parte porque la gente se aprendió cuánto te salían las sanciones en puntos del carné mejor que su cuantía o lo que valía en pesetas esa cantidad: 'medallita para nosotros'. 

A pesar de tanto miedo a verse sin alguno, en todo este tiempo, solo a 214.150 conductores les han quitado puntos. Sí son para preocuparse un poco más las cifras de los 8.759 permisos que han sido retirados dos veces y los 219 conductores que han logrado quedarse sin todos los puntos del carné en tres o más ocasiones en solo una decena de años. Es verdad que cuando te lo devuelven solo tienes ocho, pero lo normal es tener entonces más cuidado. En todo caso, parece claro que una de los fallos del carnet por puntos son los cursos de recuperación, que tienes que hacer obligatoriamente si los pierdes todos y voluntariamente para recuperar una parte. 

Por lo menos eso es lo que han respondido los internautas en la encuesta que la DGT tiene en su web: el 87% dice que los cursos de recuperación no sirven para nada. En el cuadro de abajo repasamos otros problemas de un sistema mejorable, pero hasta ahora, muy eficaz. Quizá no tanto para los 17 millones de conductores (59,3%) que recibimos, en julio de 2012, el otro punto adicional -hasta los 15- tras llevar cinco años sin sanciones. Aunque, de hecho, muchos no lo merecíamos, porque habíamos sido multados -con pérdida de puntos- en Ayuntamientos donde no se habían adscrito al sistema informático de Tráfico. Te recomiendo echar un vistazo a este encuentro digital en con la DGT que se inició el 1 de julio para leer las preguntas y comentarios de los usuarios. 

Madrid, durante bastante tiempo, por ejemplo. La desidia llegó a tanto que la DGT convocó a los medios en otoño de 2015 para denunciar que cientos de localidades pequeñas y 11 grandes ciudades vivían todavía en un limbo electrónico. Ahora se dice que el efecto del carné por puntos se ha agotado tras una década.

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