Dani Pedrosa, es ahora o nunca

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Dani Pedrosa, es ahora o nunca. El piloto de Castellar del Vallés está atravesando probablemente su temporada más complicada en MotoGP. Los resultados no salen y las sensaciones de Dani con la moto son todavía peores, lo que ha llevado al español a una travesía por el desierto cuyo billete de vuelta es completamente desconocido. 

Pero llegamos a Sachsenring, un circuito balsámico para Dani Pedrosa en el que ha conseguido ni más ni menos que 4 victorias, siendo el que más triunfos tiene en MotoGP. Un trazado que también ha sido siempre muy afín a las particularidades técnicas de la Honda y donde este año espera poner fin a una mala racha que empieza a ser preocupante. 

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A diferencia de otros años, en 2016 claramente se ve a un Dani Pedrosa que no puede coger la sartén por el mango. No está llevando una Honda, sino que como dice él, su moto es "la moto de Márquez". A esta primera complicación, obvia por otra parte ya que el de Cervera ha demostrado claramente ser la referencia de HRC en las últimas temporadas, se le une la nueva electrónica y los Michelin, otros dos compañeros de viaje que están haciendo la vida imposible al bueno de Dani. 

Queda la última bala en la recámara. El circuito donde el año pasado, tras su intervención por síndrome compartimental y sus problemas al inicio de la temporada, vio la luz. Pedrosa acabó segundo y a un ritmo similar al de Marc Márquez, que ganó la carrera. Fue un punto de inflexión a partir del cual Pedrosa empezó a carburar hasta terminar la temporada siendo uno de los pilotos más fiables y con dos triunfos en su haber. 

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No se antoja fácil en esta ocasión la proeza de Sachsenring. Es evidente que los problemas de Pedrosa no van a solucionarse a golpe de varita, y que esta temporada nada es lo que parece. Un piloto o una moto que van rápido en un circuito pueden ir peor en el siguiente y viceversa. Márquez lo demostró en Mugello y Rossi hizo lo propio en Montmeló. Por lo tanto, habrá que ver hacia qué lado se queda la moneda que lanzará al aire Pedrosa este fin de semana. 

Lo único claro que hay en este entuerto es que si Dani Pedrosa no es capaz, al menos de subir al podio este fin de semana, las dudas empezarán a ser muy densas en torno a su figura. Los detractores de su decisión de renovar con Honda sonaran con más fuerza y las perpsectivas hacia final de temporada no serán muy halagüeñas, aunque si en algo es expero Pedrosa es en revertir situaciones que comienzan de manera negativa.