Logo Autobild.es

Cinco motivos por los que las berlinas están de capa caída

Cinco motivos por los que las berlinas están de capa caída
Cada año se venden menos vehículos de tres volúmenes, aquí puedes encontrar los cinco motivos por los que las berlinas están de capa caída, aunque solo son los principales, podría haber muchos más.

Seguramente, hay más de cinco motivos por los que las berlinas están de capa caída, porque si antes concentraban el grueso de las ventas de coches, hace tiempo que el cetro del mercado europeo lo tienen los compactos. Y eso a pesar que en los últimos meses el segmento de las berlinas se ha puesto al rojo vivo con la llegada de nuevos contrincantes como el nuevo Skoda Superb o el Volkswagen Passat.

No te pierdas: "Prueba del Volkswagen GTE"

Que conste que el problema –o mejor dicho, la culpa- no es de los fabricantes, pero como el sector del automóvil es hipersensible a los gustos de los consumidores resulta difícil a veces decir si fue antes el huevo o la gallina. Así, llegado a este punto, tengo que decir que el primer motivo del declive de las berlinas es la proliferación de segmentos, pero solo por poner un orden, ya que podrías leer estas razones al revés. No se trata de un argumento lineal, sino de una especie de círculo vicioso que está haciendo que las berlinas vayan de capa caída cada vez más.

1. Proliferación de segmentos

Antes, cuando querías un coche, ibas al concesionario y allí tenías urbanos, utilitarios, compactos, berlinas y monvolúmenes para elegir. Y eso en las marcas con más oferta. Ahora, con la proliferación de segmentos, hay comerciales en los concesionarios que no saben si lo que están intentando venderte es un coupé, un familiar o un crossover. Hay marcas, como Nissan, que clasifica el Qashqai como un compacto, que no ayudan nada en esta tarea. De hecho, hasta a veces los propios periodistas especializados en motor tenemos problemas para encasillar un nuevo modelo, sobre todo, cuando no puedes quedarte para nada con la extravagancia que te ha contado el fabricante de turno. Esto, desde luego, va en detrimento de las berlinas.  



2. Menos ventas por los SUV

Si te ofrecen un concepto nuevo de vehículo, salvo que seas un ser anodino que quiere pasar inadvertido, lo normal es que te llame la atención. Eso ha pasado con los SUV, que además las marcas anuncian como eficientes devoradores de kilómetros en autopista, versátiles para los caminos y, muchas veces, con una oferta precio/equipamiento más atractiva que la de las berlinas. Encima, vas más alto, lo que te da una mayor sensación de seguridad, tanto frente a los riesgos del tráfico como psicológicamente hablando. Esto ha hecho que los SUV en todas sus subcategorías, les hayan robado protagonismo. Además, ¿qué es más representativo un BMW Serie 5 o un BMW X5? Por poner un ejemplo de SUV que, además de todo, sí ofrece un comportamiento en carretera colosal. Un dato: hace un año que en EEUU se han empezado a vender más crossover que berlinas. Ahí lo dejo.

3. Gustos de los conductores

Antes, la berlina era el coche familiar por excelencia. Muchas veces francés o italiano, antes que alemán. Como verás en el punto de abajo, ya casi no hay berlinas italianas y las francesas como el C5 o el Laguna –ya sé, ya sé, ahora se va a llamar Renault Talismán- han dejado de ser los grandes trasatlánticos de ventas para sus marcas. El segmento se ha tecnificado mucho y, para competir, hay que elaborar productos cada vez más complejos y caros. Los consumidores españoles, a su vez, tienen menos poder adquisitivo que hace 10 años en comparación. Esto solo quiere decir que, a lo mejor habría más conductores de berlinas, pero como ya no pueden costearse este gasto, ahora llevan compactos, utilitarios y otro vehículo.



4. Menos oferta de berlinas

¿Te acuerdas del Alfa 159, del Mitsubishi Galant o del Nissan Maxima? Son berlinas que estaban en el mercado hace unos años y que sus fabricantes no han renovado nunca más, vale sí, el Alfa Romeo Giulia, ya veremos en qué queda la cosa, aunque por fuera tenga muy buena pinta. Como te decía arriba, los fabricantes viven con el ojo pegado al mercado, si creen que se van a comer con patatas la inversión en un nuevo modelo, directamente, no invierten y no lo sacan. Esto ha llevado a una pequeña contracción en la demanda, si bien como verás en el punto de abajo, dentro de la propia oferta de berlinas la cosa se ha segmentado también lo suyo.  

5. Más demanda de los familiares

En países como Italia o Alemania, prácticamente más del 60% de los coches del segmento C y D que se venden tienen la carrocería familiar. Aunque la palabra berlina proviene de los carruajes tirados por caballos, yo la asocio a un coche con tres volúmenes, así que no meto aquí a las berlinas familiares por mucho que se trate del mismo coche, pero con culo. En España, este fenómeno va también en aumento y sino, que se lo pregunte a Skoda que lleva años matriculando dos Skoda Superb Combi por cada variante berlina que vende en nuestro país. En otras marcas la proporción se acerca año a año a un 50/50 cuando, por ejemplo, a comienzos de la pasada década, menos del 20% de los turismos eran familiares. 

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.