Los cinco mejores Renault con motor trasero

Con una larga tradición en la fabricación de modelos con motor trasero, Renault tiene mucha experiencia con este tipo de vehículos. También modificándolos para crear auténticos deportivos que se han convertido en verdaderos iconos entre los aficionados. De entre todos ellos, hemos elegido los que a nuestro parecer son los cinco mejores Renault con motor trasero.

Renault Twingo 2015

Como ha sido el último en llegar, no hemos podido evitar incluir a este urbano en la lista. Ya hemos realizado la primera prueba del Renault Twingo 2015 y nos ha parecido divertido, una buena opción para los que busquen un coche pequeño que sea diferente. Sin embargo, esperamos que la marca gala se anime a lanzar una versión más deportiva, sobre todo después de ver el prototipo en el que se basó este modelo, el Renault Twin’Run con motor V6 de 320 CV de potencia.

Renault Spider

Presentado en el Salón de Ginebra de 1995, el Renault Spider era un deportivo sin concesiones. La primera versión ni si quiera montaba un parabrisas, por lo que los dos pasajeros que podía transportar necesitaban llevar casco. Lo único ‘normal’ que tenía este modelo era su motor, un 2.0 de cuatro cilindros con 150 CV de potencia que había sido tomado prestado del Renault Mégane coupé.

Renault R8 Gordini

En octubre de 1964, el Salón de París fue testigo de la presentación del Renault R8 Gordini. Este modelo fue desarrollado con la colaboración de Amédée Gordini y convirtió al R8 Major, en el que estaba basado, en un auténtico coche de carreras capaz de alcanzar los 175 km/h. Se comercializó en exclusiva en color ‘French Blue’ (azul francés) con dos líneas blancas que recorrían longitudinalmente la  carrocería. En 1966, la cilindrada del motor aumentó de los 1.108 centímetros cúbicos originales a 1.224 y se añadieron dos luces adicionales en el frontal.

Renault 5 Turbo

El prototipo del Renault 5 Turbo sobrepasó las expectativas de los aficionados cuando fue presentado en 1979. Un año más tarde, llegó la versión de producción, con su característica carrocería ensanchada. Pero lo más importante estaba en su interior. El propulsor se situaba tras los asientos delanteros, en posición central trasera. Este bloque de 1.397 centímetros cúbicos con turbo Garret era capaz de entregar 160 CV de potencia máxima. En 1983 llegó la versión Turbo 2, en la que los paneles de la carrocería pasaron a ser de acero (en lugar de aluminio) y la respuesta del motor se suavizó, aunque seguía ofreciendo el mismo rendimiento. Se produjeron 3.424 unidades hasta que dejó de fabricarse en 1986.

Renault Clio V6

El Renault Clio V6 era, hasta la llegada del nuevo Twingo, el último Renault con motor trasero fabricado. Su intimidante aspecto llamaba más la atención que el de muchos de los superdeportivos del momento. Al igual que el R5 Turbo, el motor pasó a estar ubicado en posición central trasera. Sin embargo, en lugar de ser un cuatro cilindros sobrealmientado, disponía de un bloque V6 3.0 que producía 230 CV en la primera serie y 255 CV en la segunda y última serie. Este último era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,8 segundos y de alcanzar los 246 km/h.