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Camino de Los Yungas: la Carretera de la Muerte

Camino de Los Yungas: la Carretera de la Muerte
El camino a Los Yungas (Bolivia) es conocido como la ‘Carretera de la muerte’ y ostenta el dudoso honor de ser la vía más peligrosa del planeta.

Entre la región boliviana de Los Yungas, al noroeste de Bolivia, y La Paz, la capital del país, hay una vía conocida en todo el planeta como 'La Carretera de la Muerte'. Tal vez, la palabra 'carretera' sea la menos descriptiva posible de este simple camino que se abre paso a través de la cordillera de Los Andes, de apenas tres metros de ancho y sin pavimentar. Aunque el gobierno lleva desde 1995 tratando de mitigar la peligrosidad de la carretera de Los Yungas con diversas actuaciones, todavía no existe una vía alternativa a esta especie de sendero para ciclistas utilizado principalmente por camiones y autobuses.

Como puedes ver, cuando se circula por 'La Carretera de la Muerte' con uno de estos voluminosos vehículos, la caída al vacío puede sobrevenir en cualquier momento, aunque parezca que se están tomando todas las precauciones. No hay estadísticas fiables sobre el número de siniestros que acontecen en esta vía de apenas 80 kilómetros de longitud –con más de 3.000 metros de desnivel total- aunque, según los datos oficiales del Gobierno de Bolivia, en 2011 se produjeron aquí unos 40 siniestros mortales. Otras fuentes hablan de unas 200 víctimas al año.

La carretera de los Yungas fue construida en los años 30 del Siglo XX. Hay quien afirma que, desde entonces, pueden haber muerto aquí unas 200.000 personas. Como se cuenta en el vídeo de más abajo, los peores accidentes que se recuerdan en la región son aquellos en los que se han visto envueltos autocares, en algunos casos, repletos de pasajeros. A pesar de su peligrosidad, esta carretera atrae cada vez a un número mayor de visitantes y aventureros atraídos por su popularidad y las hermosas vistas que ofrece.

Eso sí, todo tiene un precio porque mientras contemplas ese espectacular paisaje, te estas jugando la vida con la rueda del coche o de la bici a pocos centímetros de un barranco con hasta 800 metros de caída libre. Además de la orografía de pesadilla y de la gran cantidad de vehículos de gran tamaño que circulan por la carretera de Los Yungas, el otro factor que incide en la peligrosidad de esta vía son sus frecuentes derrumbamientos.

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