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Volvo S60 D5 Geartronic, la opción sueca

El Volvo S60 D5 es un producto diferente dentro del segmento de las berlinas medias premium que dominan los alemanes a placer. Eso sí, ofrece unos niveles de calidad y realización que están por encima de la media y, ahora, estrena un nuevo motor diésel de 215 CV.

A coches como el Volvo S6 D5 Geartronic te lo puedes encontrar en escenarios como unos chalets adosados, en un centro comercial con un toque pijo, a la salida de ir a jugar al pádel e, incluso, en la misma puerta del teatro. Sí, lo puede ver ver por todos sitios, pero te aseguro que no más que un Audi A4, BMW Serie 3 o Mercedes Clase C. Este trío alemán es el que lleva la voz cantante en el segmento de las berlinas premium y, por eso, hay algunos conductores que prefieren tener un coche que tenga una imagen menos gastada y, sobre todo, no tener el mismo coche que su vecino. Además, el Volvo tiene una imagen más discreta, algo que prefieren muchos en estos tiempos de recortes que estamos sufriendo.

Recuerdo que probé por primera vez el Volvo S60 hace un par de años. Me llamó mucho la atención el toque dinámico que los chicos de Volvo le dieron a su coche. Sobre todo, después de compararlo con el antiguo Volvo S60 que era un producto demasiado burgués. Ahora, unos dos años después me reencuentro con esta berlina media.

Estéticamente sigue siendo igual y la mayor novedad me la encuentro justo debajo del capó. Ahí está alojado el motivo de esta prueba, el nuevo motor D5 de 2,4 litros que ha aumentado su potencia de los 205 a los 215 CV. Sin duda, una cifra considerable que te permite viajar más rápido que los puntos de tu carnet de conducir. Por ello, no tiene problemas para plantarse de 0 a 100 km/h en 7,6 segundos y, si estás en Alemania, alcanzar los 235 km/h. Además, este Volvo promete un consumo medio de 5,9 l/100 km que es demasiado optimista aunque te aseguro que si realizas una conducción eficiente pero alegre a la vez nunca superaras los 7,0 litros. ¿Te parece demasiado? No está nada mal. Ten en cuenta que este motor cubica 2.401 cc, pesa 1.481 kilos y tiene una transmisión automática de seis velocidades.

Cifras aparte, lo que más me ha gustado del motor del Volvo S60 es su funcionamiento. Tiene el típico sonido a cinco cilindros que me vuelve loco y, sobre todo, es muy suave. Además, sus 440 Nm de par máximo constante desde 1.500 a 3.000 rpm se notan nada más empezar la marcha por lo que las recuperaciones son de las que te dejan pegado al asiento. Eso sí, no todo son virtudes: en frío la rumorosidad de este propulsor es elevada.

Ya he te comentado que el Volvo S60 D5 no tiene el toque burgués de su antecesor. Con la nueva berlina de Volvo te puedes dar unas alegrías una carretera de montaña y, aunque no ofrece la precisión de un BMW Serie 3, sí que tiene un chasis con una puesta a punto casi deportiva que te permite disfrutar mucho. Sobre todo si escoges la opción de la suspensión adaptativa Four-C que por 1.228 euros te permite elegir entre un modo confortable, otro deportivo y un extremo Advance para los más atrevidos. Eso sí, no esperes tan poco que sea tan duro como una table y no olvides que sigue siendo un Volvo.

Por eso, su carga tecnológica en sistemas de seguridad sigue siendo muy importante. Si te quieres gastar 2.185 euros te recomiendo que instales el paquete opciones Safety que incluye el control de velocidad adaptativo, la advertencia de cambio de carril, el sistema de detección de peatones, el control de alerta para el conductor y, el más importante, el BLIS que te informa si tienes un coche justo en el ángulo muerto del retrovisor. Con todos estos dispositivos, cuando conduzcas el Volvo S60 tendrás la sensación de ir subido en búnker.

El habitáculo del Volvo S60 D5 también me ha gustado. Por supuesto, presenta ese típico diseño escandinavo con el que tan bien les ha ido a los chicos de IKEA y, de nuevo, aparece el hueco trasero en la consola central que no deja de ser un espacio inútil ya que cualquier cosa que dejas se acaba yendo al suelo -necesita unos bordes algo más altos y una superficie más adherente-. Eso sí, las plazas traseras son muy cómodas, hay espacio suficiente y no tendrás el más mínimo problema para viajar durante horas. Las traseras son más discretas, sobre todo por la justa altura libre al techo. No obstante, el sí ofrece una cota mejor en el espacio para las piernas. Pero donde no puede sacar pecho este Volvo es en su capacidad de maletero. Sus 380 litros están muy lejos de los 480 que tiene un Audi A4. Pero ya sabes… ¡el Volvo está menos visto!

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El Volvo S60 D5 es un producto diferente dentro del segmento de las berlinas medias premium que dominan los alemanes a placer. Eso sí, ofrece unos niveles de calidad

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