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Volkswagen Tiguan contra Ford Kuga

Ford Kuga y Volkswagen Tiguan repiten un duelo por la supremacía de los SUV compactos, justo ahora que la marca alemana ha renovado su modelo y estrena frontal. Por dentro, mantiene una de sus mejores armas: el motor 2.0 TDI de 140 CV, que rivaliza con el 2.0 TDCI de Ford.

Motorizaciones comparadas:

Volkswagen Tiguan contra Ford Kuga son dos de las apuestas más fuertes en el segmento de los SUV compactos. Los dos son conocidos desde hace ya tiempo, pero el alemán acaba de rejuvenecer su estética (presentación nuevo Volkswagen Tiguan) y quiere dejar claro que está a la última, que en cuestión de imagen nadie puede con él. Tras cuatro años en el mercado, el Volkswagen cambia de cara y adopta el aire de familia de los modelos más camperos de la marca. Ese frontal más estilizado, con la nueva parrilla y los faros de nuevo diseño (incluyen la imprescindible fila de LED), le dan un a nueva personalidad (vídeo Volkswagen Tiguan).

Los cambios del Volkswagen Tiguan continúan en la parte trasera -aunque de forma menos evidente- a través de unos pilotos rediseñados; y en el interior, ciertos detalles como la pantalla del cuadro de instrumentos, las salidas de aire circulares o los colores de la tapicería, todos ellos nuevos, se encargan de crear un clima más moderno y agradable. Nada más... y nada menos, me atrevería a decir. Porque en realidad el de Wolfsburgo no parece necesitar muchos cambios. Sentarse a sus mandos es sentirse cómodo a la primera.

Y ese confort continúa al empezar a rodar, con un tacto de chasis que entiende a la perfección el concepto que representa un todocamino: suficientemente firme como para que se parezca a un turismo, pero algo más cómodo y capaz de rodar por pistas con soltura. Ojo, que las versiones de esta prueba son las de tracción delantera, así que las escapadas ´offroad´... de refilón nada más. Y el Ford Kuga, ¿qué tiene que decir en todos estos aspectos? Por un lado, está más visto a nivel estético (aunque su imagen sigue resultando más deportiva). Por otra parte, ofrece un interior cómodo, de calidad y más creativo a la hora de hablar de diseño. Donde sí se nota una gran diferencia es a la hora de salir a carretera.

Aquí, el Ford Kuga se desmarca con un comportamiento más ágil, que gustará mucho a los que busquen una mayor deportividad al volante. Eso ya lo vimos cuando se enfrentó al Hyundai ix35 (vídeo Ford Kuga contra Hyundai ix35). Su pisada es bastante firme y plana para tratarse de un coche de su altura y esto, claro está, quiere decir que pierde algún punto en comodidad. Como ves, en este duelo de Volkswagen Tiguan contra Ford Kuga se enfrenta el equilibrio más puro frente a un afán de diversión manifiesto. Y algo parecido sucede con sus motores: con cilindrada y potencia casi idénticas (2,0 litros y 140 CV), el TDCi del Ford parece tener más chicha o, por lo menos, más rabia a la hora de acelerar que el TDI.

Otras cosas que el usuario de un SUV tiene muy en cuenta son la habitabilidad y las posibilidades de carga. Pues bien, en este sentido tengo que decirte que, tanto Volkswagen Tiguan como Ford Kuga, no destacan positivamente. Sobre todo si hablamos del espacio en las plazas traseras. Uno ofrece más altura para la cabeza, otro mayor anchura... pero nada significativo. Ambos deben conformarse con un simple aprobado en este apartado y con asegurar comodidad para cuatro pasajeros, ya que el quinto no viaja muy holgado. Sí sobresale, en cambio, el Volkswagen por su maletero.

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