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Prueba del Volkswagen Passat Variant Sport 2.0 TSI BMT 4Motion DSG

Nuevo Volkswagen Passat Variant lateral 2

Nacho de Haro

Su imagen no da pistas de la potente 'bestia' ante la que nos encontramos...

Tras haber probado el Volkswagen Passat más potente de la gama, la variante equipada con el poderoso motor de gasolina 2.0 TSI de 280 CV y 350 Nm de par asociada en este caso a la carrocería familiar o Variant, puedo afirmar que se trata de un auténtico lobo con piel de cordero. Porque a simple vista, cuando lo ves circulando o aparcado en la calle, difícilmente te darás cuenta de que ese no es un Passat cualquiera: es el más veloz de cuantos han llegado al mercado a lo largo de las ocho generaciones que ha tenido este modelo.

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Vale que no alcanza los 300 CV que producía el antiguo Passat R36, el más potente hasta la fecha, pero el Passat Sport 2.0 TSI BMT 4Motion DSG que he probado, con sus 280 CV, es capaz de acelerar más rápido, de gastar mucho menos combustible y, además, ofrece una dinámica considerablemente más deportiva. Necesita tan solo 5,5 segundos para pasar de 0 a 100 km/h (o 5,7 segundos si optas por el familiar). Para poner esta cifra en perspectiva: un deportivo puro como el Porsche 718 Boxster de 300 CV invierte tan solo cuatro décimas de segundo menos en completar la misma operación. ¿Entiendes ahora por qué digo que es un lobo con piel de cordero?

Para diferenciar al Passat de 280 CV del resto de variantes tienes que tener muy buen ojo. Debes fijarte en la nomenclatura, que reza 2.0 TSI con las tres letras en rojo, y en las dos salidas de escape ubicadas en los extremos del paragolpes trasero. Pero ni siguiera este último es un detalle específico, ya que por ejemplo, el diésel más potente o el Passat GTE (el híbrido enchufable) lucen los mismos embellecedores cromados tras los que se esconden las salidas de escape reales.

El Passat con la motorización de gasolina más potente disponible está reservado en exclusiva para el acabado Sport y solo puede ir asociado al sistema de tracción 4Motion y al cambio automático de doble embrague DSG de seis velocidades. Algo que es de agradecer, pues por el rendimiento que ofrece su propulsor se hacen necesarios unos reglajes de suspensión más dinámicos y la capacidad para trasladar al asfalto toda esa potencia, cosa que consigue hacer de manera extraordinaria con el sistema 4Motion apoyado en un cambio que es el complemento perfecto de un conjunto que resulta deportivo a la par que cómodo.

Al poner en marcha el motor del Volkswagen Passat Variant Sport 2.0 TSI BMT 4Motion DSG (sí, ese es el nombre completo oficial) este apenas se percibe desde el habitáculo. Es cierto que suena más ‘gordo’ que otros Passat, pero nunca resulta ruidoso o molesto incluso en la posición Sport, que abre unas mariposas en los escapes para que suenen mejor. Lo que sí que llama mi atención nada más salir es su dirección de asistencia variable y progresiva, que disminuye los giros del volante con respecto a las versiones normales (2,1 vueltas frente a 2,75) y dota al conjunto de una gran agilidad.

A esta agilidad de la que hablo también contribuye el chasis adaptativo DCC, que rebaja la altura de la carrocería en 10 mm y añade un total de cinco modos distintos (Confort, Normal, Sport, ECO e Individual), y el sistema de tracción integral. Este dispone de un embrague Haldex de quinta generación que responde de manera mucho más rápida, conectando el eje trasero en cuestión de décimas de segundo siempre que detecta pérdidas de tracción y pudiendo llegar a enviar casi el 100% de la potencia y el par al tren posterior, lo que altera por completo el comportamiento al límite del modelo.

Suma a esto la presencia de un sistema XDS+ no solo en el eje delantero, también en el trasero, y comprenderás porqué digo que este es el Passat más dinámico hasta la fecha. Este sistema electrónico permite, mediante la utilización selectiva de los frenos, regular la cantidad de potencia que llega a cada neumático.  En curvas lentas, por ejemplo, frena las ruedas interiores para evitar pérdidas de tracción y mandar de esta forma la fuerza a los neumáticos con más agarre disponible, lo exteriores. Así y a pesar de su tamaño, al volante del Passat Sport 2.0 TSI uno tiene la sensación de estar conduciendo un coche mucho más compacto y ligero.

Por lo demás, presenta las mismas virtudes de la gama del Volkswagen Passat, como son su espacioso y confortable habitáculo, su amplio y aprovechable maletero o su amplísima dotación tecnológica, tanto de serie como opcional. Claro que todo esto tiene un precio y en este caso son nada menos que 48.520 euros (versión Variant), una cantidad que si tiras del largo listado de elementos disponibles con sobreprecio, puede llegar sin problemas a sobrepasar los 56.000 euros, como sucedía con la unidad que tuve ocasión de conducir.

En nuestro comparador de seguros hemos calculado lo que costaría asegurar un Volkswagen Passat como el de la prueba. Para calcular el precio, tomamos como referencia un hombre de 40 años casado, con 15 de antigüedad de carné y sin siniestros, que vive en Madrid, utiliza el coche a diario, aparca en un garaje colectivo y recorre hasta 20 000 kilómetros anualmente. Con estos datos, el seguro a todo riesgo sin franquicia más asequible lo ofrece Direct Seguros por 335 euros. Este coste podría ser menor si optas por una póliza a todo riesgo con franquicia, que con la misma compañía aseguradora se quedaría en 234 euros al año con una franquicia de 500 euros. Recuerda que con nuestro recomendador puedes encontrar otros vehículos con características similares a las del Passat.

Valoración

Nota9

El Passat Sport 2.0 TSI BMT 4Motion DSG de la prueba es la versión más potente de la gama y es más rápido que el antiguo R36 aunque tenga 20 CV menos.

Lo mejor

Es más rápido que el Passat R36 a pesar de tener 20 caballos menos.

Lo peor

Su precio, que parte de 48.520 euros y que puede alcanzar sin problemas los 56.000 euros de la unidad probada.

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