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Prueba Seat Ateca 1.0 TSI: sencillo y práctico

Con este motor básico de gasolina podrás tener acceso a un vehículo práctico, funcional y moderno que hará las delicias de toda la familia por su versatilidad

El Seat Ateca ha puesto el listón muy alto a todos sus rivales y este Seat Ateca 1.0 TSI que pruebo no es una excepción. No en vano, acaba de conseguir el premio al Coche del Año 2017 en España. Y es que su calidad está fuera de toda duda, dándole además a Seat un buen empujón en cuanto a mejora de imagen de marca. 

Prueba Seat Ateca FR: genética muy deportiva

Bueno, parece claro que gusta y que muchos querrían tener uno en el garaje, pero... ¿cuál elegir? ¿por qué no el motor más sencillo, el Ateca de tres cilindros de gasolina y 115 CV? Tú puedes pensar: ¿no va a ser ese motor muy pequeño y con poca chicha para este coche? Dejémonos de tanta pregunta...

Para empezar, no lo vas a sacar al campo... y lo sabes. No te hace falta la tracción integral ni, mucho menos un gran motor, ya que no sois muchos en la familia o, incluso, puede que lo quieras para ti solo/a. El Seat Ateca 1.0 TSI es el más económico de todos los Ateca, primer y buen argumento. Con su acabado Reference, su precio base es de 18.390 euros, pero en estas páginas vas a ver el Ateca 1.0 TSI Style Plus, un acabado que le da mucho más empaque por fuera y con el que echarás pocas cosas de menos por dentro...

Y es que este acabado incluye cosas como las luces Full LED, sensor de lluvia y luces, asistente de cambio involuntario de carril, control de crucero o varios componentes exteriores que hacen brillar todavía más este Seat Ateca (prueba).

Pero, como te decía, lo peculiar de este modelo está bajo el capó. Su motor de tres cilindros y solo 999 cc comenzará a vivir en cuanto pulses el botón de arranque (sistema Kessy de apertura y arranque sin llave: 380 euros) y que parece pedirte a gritos que lo pulses debido a su luminoso parpadeo que imita el latido de un corazón.

Lo mejor de su motor de tres cilindros: su eficiencia, lo peor: su sonoridad. Porque su nivel de vibraciones está muy bien conseguido, dado lo difícil que resulta equilibrar un motor de tres cilindros. Uno de cuatro es fácil, porque dos cilindros contrarrestan las inercias de los otros dos, pero... ¿uno de tres? Aun así, los ingenieros de Seat se las han ingeniado para que a bordo tampoco sea para tanto y notarás casi las mismas sensaciones de un motor tetracilíndrico diésel. Claro, que estos motores de gasóleo también han avanzado tanto que su comportamiento es de una suavidad que llega a impresionar de verdad.

Me pongo en marcha con el Ateca 1.0 TSI de la prueba. Resulta tan sorprendente su agilidad en las salidas, que incluso puede hacer patinar con relativa facilidad sus ruedas delanteras. También es cierto que este SUV compacto es muy ligero (poco más de 1.200 kilos), lo que ayuda a ese ímpetu impropio de su pequeña mecánica. El ronroneo va en aumento, como si tu gato se pusiera panza arriba y le acariciaras la barriga. Se vuelve más perceptible a medida que ganas velocidad, pero no resulta molesto ni preocupante. Casi diría que a muchos de vosotros hasta les gustará ese sonido semideportivo de motocicleta. Aunque, a medida que gana velocidad, también pierde carácter. Es obvio que no es un motor que vaya a ir desahogado en grandes viajes o si lo cargas a tope con pasajeros o maletas. Por eso, no echarás de menos más potencia ni más fuerza si tus trayectos son, sobre todo, en la gran ciudad o interurbanos.

Es evidente que el turbo le da mucha efusividad, pero si se encuentra un repecho importante su par motor, de solo 200 Nm, no va a poder continuar alegrándote el día. En esas circunstancias, más vale que tengas paciencia, que seas consciente de lo que llevas y no le pidas más de lo que puede ofrecerte. Solo así serás feliz... Bueno, así, y si juegas con su sobresaliente cambio manual de seis relaciones, bajando marchas hasta que encuentres la adecuada para que el coche respire... y tú también. Además, su manejo es muy bueno, con inserciones suaves y sobre todo, bien definidas.

Sin modos de conducción

Su tracción delantera no permite equipar al Ateca 1.0 TSI con el Driving Mode, sistema con el que puedes elegir entre varios modos de conducción y que solo se puede montar si tiene tracción total. Compensa con un consumo ajustado, que he registrado en unos siete litros cada 100 km. Si quieres gastar menos, tienes el motor 1.6 TDI con la misma potencia, que baja el consumo en alrededor de un litro. Pero claro, cuesta 2.730 euros más con el mismo acabado.

En cualquiera de los dos casos, los pasajeros irán muy a gusto, gracias al espacio interior que ofrece, a pesar de medir 4,36 m de largo. Incluso si aparecen las curvas, tú disfrutarás con su dirección tan comunicativa y ellos tampoco se verán afectados por un balanceo excesivo de la carrocería.

Eso sí, si lo sacas a algún camino, puede que ya protesten más, porque esa misma y firme amortiguación, junto a las llantas de 18 pulgadas opcionales (790 euros) que montaba esta unidad, se pueden volver en tu contra. Además, aunque disfrutes de una altura libre al suelo de 18 cm, no te confíes y recuerda que estás ante la versión sin tracción integral.

Y también debes recordar que por algún dinerillo extra puedes completar el ya de por sí amplio equipamiento de esta versión Style Plus con, por ejemplo, el navegador (350 euros) o el interesante sistema de apertura automática del portón trasero pasando el pie por debajo del paragolpes (700 euros). Te dará acceso a un maletero amplio y bien rematado, en el que podrás meter muchas cosas gracias a los casi 1.600 litros que puede cubicar. Pero ya sabes, con este motor, no es recomendable cargarlo a tope y querer subir el Tourmalet con alegría...

Conclusión: Una versión sencilla para un uso sencillo

Este Seat Ateca de gasolina con 115 CV va dirigido a personas que no tengan intención de hacer largos recorridos a menudo ni que tengan una familia numerosa con la que lidiar a menudo, porque su mecánica se ve limitada en esos casos y es más recomendable que pongas tus ojos en el 1.4 TSI o el 2.0 TDI, ambos con 150 CV. En cambio, es ideal si buscas economía de adquisición y mantenimiento, si prefieres un motor de gasolina o si quieres calidad y espacio a buen precio. Por cierto, tienes esta misma mecánica en el acabado de acceso, por poco más de 18.000 euros, pero el equipamiento es muy básico, así que tendrás que echar cuentas para ver cuál te merece la pena. El Ateca es una de las mejores opciones del segmento, pero no la única. Si quieres descubrir otros modelos similares, echa un vistazo al recomendador, te será de gran ayuda para saber qué coche comprar

Valoración

Nota7

Ponemos a prueba el Seat Ateca 1.0 TSI, la versión de acceso a la gama del SUV español que está equipada con el motor de gasolina de 115 CV de potencia.

Lo mejor

+ Comportamiento dinámico, dirección y relación calidad precio

Lo peor

- No está disponible con cambio DSG ni tracción 4x4, potencia justa con el coche cargado

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