Logo Autobild.es

Prueba: Borgward BX7, el BMW X3 chino

Prueba: Borgward BX7. Aún no ha llegado a Europa, pero nosotros ya hemos conducido uno de los modelos que ya se venden en China, y que han traído a nuestras carreteras para probarlo y adaptarlo a nuestros gustos.

El Sr. Bogward aun no conduce un Bogward. Al menos, no a diario. Christian Bogward (49), sobrino del gran Carl F.W., llega en un Volkswagen CC. Los coches que llevan su nombre son escasos por estos lares: modelos preserie de producción china que Bogward (la empresa, no la persona) solo usa para probar y afinar. En China ya se venden. Nosotros nos ponemos al volante, por primera vez, de la versión europea. Prueba: Bogward BX7.

Christian Bogward se baja del coche y los primero que me dice es: "No te irritas si notas como que el motor se atraganta a 3.500 vueltas. Es un tema de electrónica. Los desarrolladores están trabajando en ello". 

¿Quieres saber cómo será el Bogward BX5?

Es el último pulido al Bogward BX7 que llegará a Europa, y que ya conducen 10.000 en China. Los chinos han fabricado un coche que no parece en absoluto chino. Al menos, no los modelos que hemos probado en el pasado en nuestras páginas. 

Ni hay nada en este Bogward de preserie que esté improvisado. Las puertas cierran con un sonido seco y contundente, el cuero de los asientos transmite firmeza y solidez. Y con el rombo bordado, para solaz de los fans del clásico Isabella de los años 50. Es un coche de calidad. Un SUV muy serio.

El BX7 es también un coche espacioso, y eso incluye a las plazas traseras, como demandan los compradores chinos. Y si van en el asiento delantero, disfrutarán de un mullido firme y múltiples regulaciones. En las dos filas una va relativamente bajo, o al menos es la sensación que da. La elevada altura de los hombros del coche es una herencia del Bogward clásico.

Pero aparte de eso, no veo detalles retro, aparte del rombo plateado de Bogward en el volante. Los relojes de la instrumentación son analógicos, eso sí (algo que dentro de poco será retro), pero lo compensa la enorme pantalla de 12,3 pulgadas de la consola central para manejar un sistema conectado a la red. 

El manejo parece lógico y funcional, pero aún hay una limitación: el navegador me dice la ruta en chino. Habrá un servicio de asistencia las 24 horas, como el Concierge de BMW, que empezará en la red a partir de 2017.

Circulamos por los alrededores de Bremen, por autovía, carreteras de montaña, asfalto roto, curvas cerradas. Hay poco que perturbe al Bogward. El ruido aerodinámico apenas llega al interior, ni rastro de crujidos. Las suspensiones filtran bien. "En baches cortos aún lo hará mejor, estamos en ello", me dice el Sr. Bogward. Tal vez la dirección debería ser más rápida y comunicativa. "Lleva el ajuste chino. El de la versión europea será otro". 

Borgward

Lo mismo, supongo, que el motor. el gasolina de 2,0 litros y cuatro cilindros empuja voluntarioso, pero el sonido es algo pobre. A los chinos no les gustan los diésel. Por eso, a partir de otoño de 2017, el Bogward llegará a Europa también con versiones eléctricas o plug-in hybrid. 

Conclusión

De momento me ha dejado muy buen sabor de boca, y están por ver los precios. En China parte el gasolina de 22.900 euros al cambio. Un chollo, si hablamos de un SUV de 4,70 metros. Está claro que en Europa será más caro, pero intuimos que será muy competitivo... Y hará sudar a más de un modelo de la competencia. Tiempo al tiempo. ¿Necesitas coche y no puedes esperar? Nosotros te ayudamos a encontrarlo, ya mismo y rápidamente, en nuestro recomendador. 

Valoración

0

Prueba: Borgward BX7. Aún no ha llegado a Europa, pero nosotros ya hemos conducido uno de los modelos que ya se venden en China, y que han traído a nuestras

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.