Peugeot 308 SW/Hyundai i30 CW/Opel Astra ST/Renault Megane

Peugeot acaba de lanzar la versión alargada de su 308 y lo ha llamado SW. Por eso es hora de hacer esta comparativa entre Peugeot 308 SW, Hyundai i30CW, Opel Astra ST y Renault Mégane ST. Y la verdad es que ese trasero le ha sentado muy bien. El Peugeot no solo sorprende estéticamente, también lo hace con una serie de ventajas para el día a día considerables. Empezando por un gran maletero, continuando con una buena dosis de practicidad y, para terminar, un motor vivo y ahorrador.
Pero los tres rivales a los que se enfrenta en esta comparativa no quieren ponerle las cosas fáciles al recién llegado. El primero que planta cara es su compatriota francés, el Renault Mégane, que en su versión Sport Tourer ofrece una línea casi coupé y un motor muy elástico. Desde Corea llega el espacioso Hyundai i30 CW, que presume de calidad y ofrece cinco años de  garantía. Y el último en esta contienda es un guaperas como el Opel Astra Sports Tourer, que llega equipado con el nuevo motor turbodiésel de 1.6.
Como ves, hay razones más que de sobra para volver a dar la importancia que merecen a los familiares. Y, dentro de ellos, Peugeot apuesta más fuerte.

4. Renault Mégane Sport Tourer

Podríamos decir que ya es un veterano: el Renault Mégane actual se fabrica desde el año 2008 y esta versión familiar desde 2009. Mucho, para los tiempos cambiantes en los que vivimos. La buena noticia es que el Sport Tourer no parece un coche antiguo y gracias a su silueta coupé se aleja del tópico de los familiares aburridos. El puesto de conducción tiene una buena presencia, pero apostar por un diseño moderno y estilizado, sin duda, tiene sus pegas. En este caso, pierde puntos en cuestiones relativas a la practicidad, ya que no ofrece mucho espacio, delante es uno de los más estrechos y solo el Opel ofrece menos volumen para equipaje. Este Renault está propulsado por el motor de 1,6 litros turbodiésel de 130 CV. No es especialmente silencioso, pero es el que más rápido acelera hasta los 100 km/h (9,7 segundos) y con un consumo de solo 4,9 litros es el segundo más ahorrador, solo batido por el Peugeot. El chasis está menos conseguido que el de sus rivales: las suspensiones resultan demasiado secas, tiene un comportamiento nervioso y la dirección un tacto más bien difuso. Tal vez en este tipo de detalles sí se le nota la edad.

3. Hyundai i30 CW

Los coreanos de Hyundai aprenden rápido, eso es algo ya de sobra conocido y se demuestra con este modelo una vez más. La versión familiar toma la denominación CW y mantiene intactas las características de las antes conocidas como variantes ranchera. Eso sí, con mucho estilo por fuera y por dentro, el Hyundai i30 CW  ofrece buenos acabados y espacio de sobra, especialmente detrás. Y tampoco sufre muchas limitaciones a la hora de cargarlo hasta arriba de equipaje. Su motor de 1,6 litros con 128 CV empuja con cierta fuerza, aunque respecto a los otros da la impresión de que le cuesta más tirar de los 1.425 kilos que pesa este modelo. Resulta más ruidoso y, en general, no tiene el mismo ímpetu del resto. En cuanto al tacto de la dirección, se siente más artificial que en el caso del Opel y el Peugeot. Pero eso no quita lo que decíamos al principio: los coreanos aprenden muy

rápido. Habrá que darles tiempo, porque seguro que nos sorprenderán...

2. Opel Astra Sport Tourer

Este Opel Astra Sports Tourer ha resultado ser todo un descubrimiento. Con una longitud de 4,7 metros, una medida que hasta hace no mucho correspondía a modelos pertenecientes al segmento superior, la versión familiar del compacto de Rüsselsheim ofrece unas plazas delanteras muy desahogadas. Eso está muy bien, el problema es que se estrecha en la parte trasera: el espacio en la segunda fila de asientos se mantiene en la media de esta categoría, pero el maletero es el más pequeño de todos los que aquí se citan. Sin ninguna duda, los puntos fuertes de este coche están en otros sitios. Para empezar, no puedo dejar de mencionar sus asientos ergonómicos deportivos o su equilibrado chasis. Si además montas la suspensión adaptativa FlexRide (837 euros) su rodar será absolutamente aplomado. Filtra sin problemas las irregularidades del terreno y le ayuda a lograr un rápido paso por curva. Por su parte, el nuevo motor turbodiésel de 1,6 litros también me ha encantado. Tiene una respuesta potente, es silencioso y suave, y está, sin duda, a la altura de lo esperado. Ya he mencionado algunos de los puntos flacos de esta versión, pero este Opel tiene un problema añadido: pesa 232 kilos más que el Peugeot, que es el más ligero de esta comparativa. Y eso se nota, especialmente en el consumo, ya que con 6,0 litros de media se queda muy por encima de sus rivales.

1. Peugeot 308 SW

Aquí está la versión familiar del Peugeot 308. Y qué familiar. Es 33 centímetros más largo que el cinco puertas y tiene 11 más de batalla. Eso sí, el espacio detrás no es especialmente amplio y sorprende que el respaldo sea tan vertical. Pero las críticas no van mucho más allá. El 308 SW es un coche moderno y con encanto, con soluciones como su pequeño volante o su despejado (de botones) salpicadero y, sobre todo, tiene el maletero más grande (de 610 a 1.660 litros). En el lateral hay un mando para plegar el respaldo a distancia (de serie), de manera que queda una superficie totalmente plana. También está muy conseguido su motor HDi de 1,6 litros con 120 CV, que cumple con la normativa Euro 6. Es una mecánica viva, silenciosa y ahorradora (el mejor registro de la comparativa, 4,3 litros) que, eso sí, pierde fuerza en sexta por su largo desarrollo. Con 1.365 kilos es el que menos pesa y su comportamiento es firme y manejable. Además, la dirección es muy directa. ¿Resultado? primer puesto para Peugeot. Es un familiar, pero... ¡qué familiar!