Nuevo Jaguar XKR-S Convertible, nacido para arrasar

Cuando vi por primera vez el Jaguar XKR-S Convertible pensé que hay coches que nacen con estrella, una estrella que jamás se apagará como la del mítico Jaguar E-Type. Hasta EEUU, concretamente San Diego, he viajado para poner a prueba a esta bestia que arrasa con todo y que le da igual tener techo o no porque sus prestaciones son idénticas. Asombroso, ¿verdad?

Si de algo puede presumir la marca inglesa es de fabricar coches con carácter. Atrás han quedado oscuros tiempos en donde los Jaguar se disfrazaban de simples utilitarios porque, de un tiempo a esta parte, y bajo el prodigioso lápiz de Ian Callum todos sus coches presentan unas líneas que enamoran desde el primer segundo. El Jaguar XKR-S no podía ser menos.

Después de probar en profundidad la versión Coupé, ahora me encuentro a bordo de la descapotable. Afortunadamente luce el sol por lo que no dudo en pulsar el botón que quita la capota de lona, esta operación tarda solo 18 segundos, es rápido aunque el nuevo Porsche 911 Cabriolet tarda 13 segundos. Pero, ¿qué son cinco segundos en la vida de alguien que tiene este cochazo entre las manos? Lo que impresiona totalmente es conocer el dato de que este es el Jaguar de producción más rápido y potente de todos los tiempos.

Con respecto al Jaguar XKR, la variante RS reduce su altura al suelo 10 mm y presenta un interior, si cabe, más deportivo con asientos tipo bacquet eléctricos con 16 movimientos, tapizados en piel efecto fibra de carbono. Exteriormente, llama la atención el nuevo paragolpes frontal con tomas de aire más anchas y bajas, un alerón sobredimensionado y deflectores laterales. Si a esto le sumas el poder seleccionar colores tan llamativos como el azúl eléctrico o rojo incandescente, el paquete queda perfectamente cuadrado.

Mientras recorro a baja velocidad las calles de San Diego pienso en un detalle que me ha dejado alucinado: tanto el Coupé como el Convertible completan las mismas prestaciones. Te las resumo: una potencia de 550 CV, par máximo de 680 Nm, velocidad máxima de 300 km/h y aceleración 0-100 km/h en 4,4 segundos. Si lo comparo con el XK normal, el RS aumenta un 10% la potencia y el par, su respuesta es ahora mucho más ágil y el sonido deportivo se ha exagerado: no hay más que apretar el acelerador a fondo para que un zumbido se te meta en el tímpano como si un 747 hubiese sobrevolado tu cabeza.

Es un coche que a velocidad normal y de crucero podría conducirlo cualquier persona. Es dócil, amable y para nada brusco. Sin embargo, tal y como pude comprobar en la base aérea donde se rodó la pelicula de Top Gun, con los controles completamente desconeactados aflora en él una bestia que, o cuentas con manos privilegiadas o el coche te lleva por donde quiere. Esa es, precisamente, su magia, su doble personalidad y lo divertido que es intentar sacarle de sus casillas.

Capítulo a parte merece el Control Dinámico de Estabilidad (DSC) que ha sido revisado específicamente para este modelo. De forma segura, el coche permite que el conductor derrape en cierta forma y viva en sus manos el potencia asombroso de esta fiera, aunque si la cosa se desmadra más de la cuenta, el XKR-S se encarga de devolver a los pasajeros a la trayectoria adecuada.

Capacidad de seducción, potencia incansable, prestaciones de infarto, consumo de locura... Todo esto y mucho más es lo que te ofrece el nuevo Jaguar XKR-S Convertible, un coche que ya tiene su lugar en la historia.