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Mini Countryman y Nissan Juke: una buena fórmula

En esta batalla hay un vencedor por puntos y otro que resulta más interesante si cabe por todo lo que ofrece de manera global. Este último sigue la estela de su hermano mayor, que es todo un superventas… No te pierdas cómo se desenvuelven estos dos pequeños todocaminos

Juke y Countryman, esta es la doble apuesta más fuerte dentro del segmento de los utilitarios en versión SUV. Su historia, en resumen es, la siguiente: Por una parte, Mini supo detectar ese nuevo nicho de mercado y decidió crear un modelo de cinco puertas, con espacio de verdad en sus plazas traseras (aunque solo hay dos) y un maletero en el que puedes llevar algo más que una mochila de fin de semana cuando viajas acompañado.

El objetivo del Countryman es ofrecer practicidad conservando parte de la esencia de la marca. Lo primero lo consigue de sobra; lo segundo también: sigue teniendo un toque de exclusividad y además es agradable de conducir, aunque sea a costa de perder gran parte de la deportividad y la agilidad características del modelo original inglés. Esto es normal si se tiene en cuenta que el Countryman es más largo, ancho y alto. Y, sobre todo, tiene un sobrepeso de 200 kilos.

Por su parte, y más o menos al mismo tiempo, los responsables de Nissan pensaron que si el Qashqai estaba arrasando en su segmento, por qué no iba a poder hacerlo también un nuevo modelo en el escalón inferior. Y se pusieron manos a la obra, empleando una fórmula parecida, aunque menos conservadora. Su pretensión era crear un todocamino que convenciera por calidad, con capacidad para circular fuera del asfalto (al menos algunas versiones de la gama, igual que sucede con su rival) y con un precio inferior al de sus competidores. Todo sin olvidar un toque moderno en lo que a diseño y tecnología se refiere.

Sin duda, en este subsegmento tan especial de coches que rondan los cuatro metros de largo, tener un toque cool es algo fundamental para alcanzar el éxito. Una vez situados en contexto, llega el momento de saber cuál de los dos protagonistas de esta prueba es más recomendable. Lo primero que me interesa contarte es cómo son de amplios y prácticos. Empezando por el Countryman, no se trata de un simple Mini mejorado, sino de un señor coche que ofrece un cómodo acceso a sus dos filas de asientos y en el que se viaja con una sensación de espacio más que aceptable.

Además, su maletero es muy útil con su volumen de 350 litros. Mientras tanto, esta batalla el Juke la libra con cierta dificultad, ya que es más pequeño en su parte trasera y, sobre todo, incómodo a la hora de acceder a ella. En el Nissan, la funcionalidad parece quedar por detrás del diseño, ya que el maletero (250 litros) también se queda muy escaso. A su favor, en cambio, hay que decir que las plazas traseras dejan una superficie de carga plana cuando se abaten los respaldos, lo que se agradece infinitamente a la hora de cargar objetos voluminosos en el coche.

En sus entrañas hay dos motores diésel: el 1.6 de 112 CV del inglés frente al 1.5 dCi de 110 CV del japo. En este caso, el Juke canta victoria porque se mueve con más rabia y deja atrás a un Mini que parece estar adormecido cuando se trata de hacer adelantamientos. Más rabia, como te decía, pero también un poco más de sonoridad y de consumo (un litro por encima). Es el precio a pagar por unas prestaciones sensiblemente superiores, pero aun así, apuesto por el dCi del Nissan.


Respecto al apartado dinámico, hay pocas diferencias. Aunque no pisan exactamente de la misma forma, en la práctica los dos tienen un nivel de agilidad similar y te permiten disfrutar entre curvas. Al final, el Mini acaba quedando por delante por su buena capacidad de frenada y su precisa dirección. Uno es un poco más rápido, el otro más práctico... ¿Y el precio? ¿Cuál de los dos compensa más? Para que te hagas a la idea de por dónde van los tiros, te diré que en los modelos base ambos tienen un equipamiento similar (escaso en los dos y favorable al Mini por el arranque en pendiente y el Start-Stop), pero el Nissan cuesta 7.000 euros menos. Y si tomo como referencia el acabado tope del Juke (justo el de esta prueba, Tekna Premium: 20.650 euros) y a continuación cojo el catálogo de opciones del Mini para igualarlo en equipamiento, el precio del británico sobrepasa los 29.000 euros. Está claro cuál es el más económico.

NISSAN JUKE 4L Turbo, del. trans. • Cilindrada: 1.461 cc • Potencia: 110 CV a 4.000 rpm • Par motor: 240 Nm a 1.750 rpm • Tracción delantera • Cambio manual de seis velocidades • Neumáticos: 205/60 R16 • La./an./al.: 4.135/1.765/1.468 mm • Maletero: 251 litros • Depósito del combustible: 46 litros • Aceleración 0 a 100 km/h: 11,2 seg. • Velocidad máx.: 175 km/h • Consumo medio: 6,3 l/100 km• Emisiones CO2: 165 g/km.

MINI COUNTRYMAN 4L Turbo, del. trans. • Cilindrada: 1.598 cc • Potencia: 112 CV a 4.000 rpm • Par motor: 270 Nm a 1.750 rpm • Tracción delantera • Cambio manual de seis velocidades • Neumáticos: 205/60 R16 • La./an./al.: 4.097/1.789/1.561 mm • Maletero: 350 litros • Depósito del combustible: 46 litros • Aceleración 0 a 100 km/h: 11,2 seg. • Velocidad máx.: 185 km/h • Consumo medio: 5,3 l/100 km• Emisiones CO2: 138 g/km.

Valoración

Nota8

En esta batalla hay un vencedor por puntos y otro que resulta más interesante si cabe por todo lo que ofrece de manera global. Este último sigue la estela de su

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