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Infiniti EX 3.0D: ¡bienvenido seas!

Gracias al motor V6 diésel de Renault, el Infiniti EX gana en virtudes. ¿Una de ellas? Consumir menos. Aquí tienes la prueba a fondo del Infiniti EX 3.0D.

Pretender vender un SUV de gasolina con muchos caballos y un consumo medio elevado es muy complicado. Es lo que ha estado intentando la marca japonesa con el Infiniti EXun buen coche, bien terminado pero que hasta ahora sólo tenía un propulsor V6 al que le encantaba beberse más de 11 l/100 km. Y en cuanto le pisabas un poco, la cifra se disparaba hasta los 15 litros. Ahora, con la llegada del Infiniti EX 3.0D, equipado con el motor diésel de Renault, las cosas cambian para los japoneses. Y para bien.

El propulsor de 3,0 litros (código V9X) encargado de mover el Infiniti EX ha sido desarrollado por el fabricante francés, por eso se estrenó en el Laguna Coupé, pero los que de verdad le están sacando todo su jugo son los japoneses. Ya lo llevan los Nissan Pathfinder y Navara y los Infiniti FX, la berlina M y el EX que he probado esta semana. Te digo lo más importante: es un buen motor. Desarrolla 238 CV, muchísimo par por debajo de las 2.000 rpm (550 Nm) y su consumo medio, sin ser el más bajo del segmento, es bastante razonable (he obtenido 9,2 l/100 km en mi ruta habitual).

Mecánicamente, un producto impecable

Pero no sólo el motor del Infiniti EX diésel está diseñado con cariño, el resto del coche también. Por ejemplo, la caja de cambios de siete velocidades tiene un funcionamiento muy suave y, aunque no es un prodigio de rapidez, se lo perdono. Más que nada porque este no es el coche tipo para hacerte un tramo de rallys. Eso sí, como cuesta más de 60.000 euros, no estaría mal que dentro del equipamiento de serie llevara también unas levas en el volante para manejar la transmisión. No lo puede equipar ni como opción. Su capacidad de frenado es correcta, pero con matices: es mejor por lo bien que resiste un uso intensivo que por los pocos metros que tarda en detenerse desde 100 km/h. Además, su comportamiento dinámico está muy conseguido y el eje delantero siempre resulta confortable. El trasero, en zonas bacheadas, peca de ser demasiado seco.

Pero este Infiniti EX se lleva su mayor tirón de orejas por su habitabilidad. Hay poco espacio para las piernas en las plazas posteriores, la altura también es justa y la capacidad del maletero es muy, muy limitada: tiene sólo 340 litros, mientras que rivales como el Audi Q5 te ofrecen 540 (con una carrocería de la misma longitud).

Toma de contacto: Emilio Salmoral

Prueba a fondo (por Enrique Trillo)

Hace ya tres años que el Infiniti EX sumó esta variante diésel a su potente gama de gasolina. Pero pese a ello, las ventas de este modelo no terminan de despuntar. Probablemente muchos clientes piensan que, puestos a invertir en una marca de lujo como la japonesa, es mejor hacer un esfuerzo extra y lanzarse a por el enorme Infiniti FX. Ahora, para relanzar el Infiniti EX 3.0D los responsables de lamarca en España han decidido seguir una estrategia que ya establecieron en su día con su hermano mayor. Por eso ofrecen el EX con una versión especial denominada GT Edition (disponible hasta el 30 de septiembre) y que permite acceder a este modelo desde 44.900 euros.

Pero antes de que te dejes llevar solo por el precio deja que te cuente (por si no conoces del todo bien esta marca o el modelo en cuestión) por qué se diferencia de su competencia. Infiniti es la marca de lujo de Nissan y, por tanto, promete un ambiente premium y una calidad por encima de la media. Por su parte, el Infiniti EX sorprende por su concepto a medio camino entre un SUV y un coupé. Eso da idea de cómo se comporta sobre el asfalto, donde muestra unas maneras francamente buenas, de las mejores de su categoría. Su tracción integral de serie, apoyada en unos neumáticos como los Bridgestone Potenza que monta la unidad probada, logra que vaya pegado a la carretera y que la fuerza del motor se trasmita siempre de manera correcta.

Ya que hablo del propulsor, te recuerdo que el bloque diésel que monta el Infiniti EX no es precisamente un prodigio de suavidad y silencio, pero que sí gusta por su potencia y empuje desde abajo (550 Nm de par desde solo 1.750 rpm). Además, ofrece un consumo bastante razonable teniendo en cuenta que entrega unos buenos 238 CV. 

Gasto razonable del Infinit EX diésel

En este test, el Infiniti EX diésel se ha conformado con 8,9 l/100 km. Un dato que supera el oficial en menos de medio litro, y eso que la unidad de la prueba montaba llantas de 19 pulgadas, en lugar de las de 18” con las que se han homologado las cifras oficiales.

El Infiniti EX 3.0D va unido a un cambio automático de siete velocidades, cuyo funcionamiento es correcto, pero que no te dejará boquiabierto por su velocidad. Gracias a él logra unas prestaciones realmente buenas, que hacen olvidar que vas al volante de un coche de casi dos toneladas de peso, porque pasa de 0 a 100 km/h en 8,5 segundos (la diferencia respecto a los valores oficiales es debida a las llantas de mayor diámetro del modelo probado) y consigue unas recuperaciones sorprendentes que dan una idea muy clara de lo fácil que te pone las cosas a la hora de adelantar.

Hay que aclarar que esta variante promocional Infiniti EX 3.0D GT Edition se basa en las versión de acceso a la gama y está muy bien equipada... Pero le faltan algunos elementos de serie, como el navegador. Si buscas un EX con todo, Infiniti también ha preparado un GT Edition basado en el GT Premium, disponible por 52.900 euros, lo que supone un ahorro de más de 13.000 euros.


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Gracias al motor V6 diésel de Renault, el Infiniti EX gana en virtudes. ¿Una de ellas? Consumir menos. Aquí tienes la prueba a fondo del Infiniti EX 3.0D.

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