Honda Micro Commuter Prototype: respuesta al macrotráfico

El Honda Micro Commuter Prototype es la evolución de una de las sensaciones del Salón de Tokio de 2011: el Micro Commuter, que destacaba al carecer de volante, de modo que la dirección quedaba encargada a dos palancas (Twin Lever Steering, como las denominaba Honda), como los mandos de un avión. Las palancas del Honda Micro Commuter contaban con un funcionamiento ciertamente peculiar, pues para poder girar a la derecha, por ejemplo, tenías que tirar hacia ti de la palanca derecha mientras empujabas la izquierda hacia dentro, y para girar a la izquierda, había que hacer lo contrario. Al fin y al cabo el Micro Commuter es una apuesta de movilidad a medio camino entre una moto y un automóvil.

El Honda Micro Commuter Prototype –que he tenido la oportunidad de probar en las enormes instalaciones con las que cuenta Honda en Tochigi (Japón)– cuenta con volante, la forma más lógica y cómoda de maniobrar en los núcleos urbanos, el que será su hábitat natural. En este sentido, Honda va a llevará a cabo en 2013 tests de demostración entre la población nipona con el fin de verificar el potencial de este revolucionario vehículo en distintos usos como, por ejemplo, para trayectos de corta distancia de familias con hijos pequeños o ancianos, servicios de paquetería y 'car-sharing' (compartir vehículo).

El prototipo ha adoptado la Plataforma de Diseño Variable que posibilita colocar ciertos componentes como, por ejemplo, la batería, el motor y la unidad de control bajo el suelo del vehículo o en la parte trasera, con el fin de concentrar las funciones de conducción en un espacio compacto. De este modo resulta más sencillo desarrollar y producir una carrocería y un interior que permiten varios usos así como la satisfacción de distintas necesidades de usuarios. Así, el Honda Micro Commuter Prototype podría contar con carrocería abierta, cerrada o con bañera, en el caso de servicios de paquetería.

El Honda Micro Commuter Prototype que AUTO BILD tuvo la oportunidad de probar contaba con la carrocería normal. Tan normal que a cierta distancia parece un Smart o un Toyota iQ, aunque algo más pequeño en este caso (2,5 metros frente a 2,98 del iQ). Es cuando accedes al interior del Micro Commuter Prototype cuando comienzan las grandes diferencias e incluso las exclamaciones de asombro por la originalidad del producto. Y es que frente al puesto del conductor –a cuya espalda hay dos minúsculos asientos para dos niños pequeños– se halla un volante y nada más: ni un reloj; nada. Y es en ese momento, cuando se acerca el ingeniero con una tableta, cuando pasas de la incredulidad al "¡oooooohhhh!". En esa tableta se inserta literalmente en unas carriles y se engancha a un conector y, ¡voilà!, ya tenemos salpicadero. Desde esta tableta (un iPad, concretamente), que muestra la velocidad, cuentakilómetros, indicador de carga de la batería, distancia hasta casa… también se controla la música que se quiere escuchar así como activar la calefacción de casa (la Honda Smart Home). Además, gracias a que el vehículo cuenta con células solares en el techo, se puede recargar la tableta.

La dirección dura del Honda Micro Commuter Prototype

Es hora de probarlo. Al tratarse de una unidad de preserie, todo parece vulnerable. Plásticos por doquier en un color blanco que le confiere un aspecto muy agradable a la vista. Para arrancar primero se gira la llave, después se pisa el freno, se arranca, se pulsa la tecla D –situada a la izquierda del volante– seguidamente se desactiva el freno de mano que hay bajo la dirección, bien escondido y se pisa levemente el acelerador. Al tratarse de un vehículo eléctrico, no eres consciente de que el coche está arrancado hasta que la tableta te muestra el nivel de carga. Pisas el acelerador y el Honda Micro Commuter Prototype inicia la marcha con un leve tirón. El recorrido es una pequeña pista en la que hay existe una zona de conos para realizar un ejercicio de giro. El ingeniero me indica que no pase de los 40-45 km/h (su velocidad máxima será de 80 km/h). El vehículo resulta algo pesado, como si los neumáticos estuvieran pegados al asfalto, sensación que se va diluyendo a medida que alcanza velocidad.

Al llegar a la zona de conos, toca girar el volante y, caramba, cuesta moverlo. Y es que el vehículo carece de dirección asistida por motivos de reducción de peso. En este sentido habrá que estudiar qué interesa más si cargarle de peso con una asistencia o hacer sudar un poco a los conductores, pues si su terreno habitual va a ser la ciudad, requerirá de una mayor maniobrabilidad.

En cualquier caso, el Micro Commuter Prototype es un primer esbozo que habrá que seguir puliendo.

Ficha técnica Honda Micro Commuter Prototype:

Dimensiones (largo/ancho, alto): 2.500/1.250/1.445 mm

Velocidad máxima: 80 km/h (o más; dependerá de las regulaciones del Gobierno Japonés)

Autonomía máxima: 60 km (aprox)

Batería: ion-litio

Tiempo de recarga: menos de 3 horas

Potencia máxima: 15kW (o más; dependerá de las regulaciones del Gobierno Japonés)