Prueba del Fiat 500X 2.0 Multijet 4x4 Automático de 9 velocidades

Empiezo la prueba del Fiat 500X 2.0 Multijet 4x4 Automático de 9 velocidades. De momento lo sitúo en ‘Auto’. Arranco el cuatro cilindros diésel y el sonido del motor llega con demasiada facilidad a mis oídos. Después de lo bien que decían haber tratado este apartado los responsables de Fiat me espera menos notoriedad en el habitáculo. De todas formas, tampoco es algo exagerado. Coloco la palanca en la ‘D’ e inicio la marca. Mientras acelero el cambio va engranando con suavidad y resulta extraño poder circular en ‘séptima a poco más de 50 km/h. Paso la modo ‘Sport’ para buscarle las cosquillas al chasis del 500X y este me responde ‘tensando’ los músculos. La respuesta se vuelve más vivaz. no es algo que pueda pasar desapercibido. Se nota y mucho. La dirección se endurece y cualquier movimiento en el acelerador tiene su rápida respuesta en el motor. 

Lo que también nota es la dureza de un bastidor que me ofrece un comportamiento muy dinámico en la zona de curvas por la que estoy atravesando. esto me gusta pero por contra es cierto que cuando hay que pasar por encima de un tramo de asfalto algo más roto, las sacudidas con importante. Las suspensiones van demasiado tensas y si bien saben contener perfectamente las oscilaciones de la carrocería cuando estás apoyado en una curva, no son capaces de filtran con suavidad los baches más grandes.

Llego por fin a la zona ‘off road’ en el centro de pruebas de Balocco, cerca de Turín. Antes de lanzarme a manchar de barro al nuevo Fiat 500X, me paro a analizar el equipamiento de mi unidad de pruebas. Lleva una pantalla de 6,5 pulgadas del sistema Uconnect que aseguran el acceso a la radio, a los dispositivos multimedia, al teléfono y a los servicios Uconnect™ LIVE y navegación en 3D. En la fila trasera el espacio es correcto sin más, mientras que el maletero se queda en 350 litros.

Y ahora sí. Me adentro en el tramo de tierra. Son todo curvas cerradas que me aconsejan reducir la velocidad y conducir en segunda marcha. Suficiente para cuando llegan las primeras rampas. El motor de 140 CV actúa sin contemplaciones. No echo en falta más fuerza. Lo que sí me gustaría que ofreciese es un control de descensos (el Renegade del que deriva sí lo tiene) porque cuesta abajo se embala y hay que echar pie al freno. Por lo demás, con unas correctas cotas ‘off road’, el Fiat 500X se desenvuelve bien en caminos con pocas dificultades. La suspensión me sigue pareciendo dura y filtra mal los socavones que me voy encontrando, pero no tengo nada que objetar a un sistema de tracción que manda el par que se necesita a la rueda correcta.

Prueba superada. El nuevo Fiat 500X sale con una bonita capa de barro. Para los que les gusten las aventuras y las escapadas de fin de semana, ya tienen una alternativa más entre el buen surtido de todocaminos que hay en el mercado. El 500X tiene un as en la manga y es el precio. No es el más barato, pero tampoco el más caro: desde 17.590 euros de la versión de acceso hasta los 29.590 euros de la variante de esta prueba. 

En nuestro comparador de seguros hemos calculado lo que costaría asegurar un Fiat 500X. Para calcular el precio, tomamos como referencia un hombre de 40 años, con 15 de antigüedad de carné y sin siniestros, que vive en Madrid, utiliza el coche a diario, aparca en un garaje colectivo y recorre hasta 20 000 kilómetros al año. Con estos datos, el seguro a todo riesgo más asequible lo ofrece Mutua Madrileña por 1.008 euros.

Este coste podría ser menor si optas  por una póliza a todo riesgo con franquicia. En este caso, la más barata sería la de AXA. Cuesta 685 euros con franquicia de 300 euros.

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