Logo Autobild.es

Citroën DS3 THP 155: pequeño velocista

Si este Citroën DS3 THP de 155 CV participara en unos Juegos Olímpicos como los de Londres, entraría por derecho propio en la lucha por las medallas. Cuesta más de 20.000 euros, pero por contra está bastante bien equipado.

Para empezar, la posición al volante del Citroën DS3 THP 155 me parece de todo menos deportiva. Sus asientos son extrañamente altos y, aunque no recogen nada mal la espalda, tengo la sensación de ir más en un SUV que en un pequeño deportivo. Después, el volante está demasiado tendido y su tamaño es también muy grande. Y para colmo, no tiene los mandos de la radio o el control de crucero a la vista.

Pero antes de arrancar este Citroën, voy a seguir analizando un interior que me ofrece pedales de aluminio, climatizador de una sola zona y un navegador (1.160 euros) con también unos cuantos años a sus espaldas. Por cierto, se maneja desde un módulo de la radio cuyo uso no es muy intuitivo, la verdad. La calidad de materiales en este Citroën DS3 THP 155 no es mala, pero es cierto que no tiene mucho que ver con la originalidad, el glamour y el gusto por los detalles que se gasta el resto de la gama DS, incluido el Citroën DS3 Cabrio que se presentó en el Salón de París. Lo que más me convence en este salpicadero es la imitación de fibra de carbono y el equipo de sonido de alta calidad, que viene de serie. Mientras que el maletero se defiende bastante bien, el espacio que deja para tus amigos en las plazas traseras no es muy holgado.

Así es por dentro

No solo es estrecho y con poco espacio para las rodillas; es que la ventanilla es tan pequeña que la sensación aquí dentro resulta claustrofóbica. Así que, puestos así, lo mejor que puedo hacer es girar la llave de contacto. Bajo el capó me espera un motor de cuatro cilindros de 155 CV que ha sido desarrollado junto a BMW. Es el mismo bloque que te vas a encontrar en Mini, aunque los valores de par y potencia son distintos. Va asociado a una caja manual de seis relaciones de tacto correcto que sabe exprimir bien cada caballo de potencia. La salida de este DS3 es buena. Tal es su ímpetu en los primeros metros de arrancada que las ruedas delanteras patinan hasta que el ESP deja todo en su sitio.

Así es su comportamiento

Las suspensiones son duras como es de esperar en un coche deportivo, pero quizá resulten demasiado secas cuando quieres bajar el ritmo. Lo divertido de este DS3 THP es que no necesitas más caballos para disfrutar en una carretera de montaña, donde te bastará con estirar la segunda hasta las 7.000 rpm para enlazar un giro con otro. Si juegas con la zaga, esta te ayudará a redondear los giros. Además, el chasis se comporta de una forma muy viva... ¡Por fin este Citroën DS3 me muestra lo mejor de sí! Después de un sprint como este, toca relajar el ritmo (el equipo de frenos cumple sorprendentemente bien). Lo tengo claro: con un rendimiento así, el THP más básico de la gama se basta y se sobra para entrar en la final de los pequeños velocistas. Las medallas ya son otra cosa...

Valoración

Nota7

Si este Citroën DS3 THP de 155 CV participara en unos Juegos Olímpicos como los de Londres, entraría por derecho propio en la lucha por las medallas. Cuesta más de

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.