Logo Autobild.es

Prueba BMW X5 M 2015: 2,3 toneladas de deportivo

El BMW X5 M 2015 es todo un peso pesado, pero cuenta con una puesta a punto sensacional que le ayuda a moverse como el mejor de los deportivos y, gracias a su motor V8 de 575 CV es capaz de alcanzar unas prestaciones que resultan difíciles de creer teniendo en cuenta que estamos hablando de 2,3 toneladas de deportivo.

Evidentemente, el BMW X5 M 2015 es la versión más deportiva y potente de la gama BMW X5, pero no voy a entrar en demasiados detalles y explicaciones teóricas porque la mayoría de sus novedades ya te las presentamos en el momento de la presentación oficial del X5 M en el Salón de Los Angeles.

En 2013 la variante M del X5 dejó de comercializarse y ahora vuelve con un nuevo motor y 20 CV más de potencia. Aunque sigue apostando por un V8, no se trata de una evolución del que ya montaba el modelo anterior, sino que es una evolución del que llevan el BMW M5 y BMW M6, es decir, un biturbo con 4,4 litros de cilindrada, pero que en este caso entrega 575 CV (+15 CV respecto al M5) y que es el motor más potente que BMW comercializa en la actualidad.

Aunque lo que más llama la atención es su salvaje cifra de par: 750 Nm de par a partir de solo 2.200 rpm. Este es el motivo por el que no se le ha podido montar la caja DKG de doble embrague del M6, que sencillamente no aguanta tanto par. A cambio, los ingenieros de M han optado por la transmisión de convertidor de par Steptronic de ocho velocidades con función Drivelogic (para modificar su respuesta) y que tan buena respuesta da en otros modelos de la marca. No, no parece perfecta para un modelo de estas características, pero te garantizo que, tras haberla probado, el resultado no es nada malo.

La verdad es que no le puedo poner una sola pega a este propulsor, que empuja como una bestia y logra unas prestaciones sensacionales, ya que acelera de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos (ya le gustaría a muchos deportivos igualar esta marca. Es 0,3 segundos más rápido que la generación anterior) y su velocidad máxima (una vez delimitada) es de 280 km/h.

Aunque el dato que verdaderamente llama la atención es que es el tiempo que ha logrado en una vuelta rápida al circuito de Nürburgring es exactamente el mismo que el que logró la generación anterior del BMW M3, que también estaba equipado con motor V8 y que marcó un crono de 8'04".

Evidentemente, esto es posible gracias al gran trabajo de puesta a punto del chasis. Monta tracción xDrive de serie, lo que le ayuda a agarrarse como una lapa en las curvas y a ganar velocidad a la salida con suma facilidad. Eso sí, debo decir que incluso en el modo confort va duro de narices, pero cuando te pones a enlazar curvas te deja con la boca abierta. No es fácil que un coche que pesa 2.275 kilos se mueva con tanta agilidad. En este punto, como es lógico, debo mencionar su precisa dirección, que te ayuda a dirigirlo justo por donde quieres, aunque su tacto duro puede llegar a resultar cansado en viajes largos.

¿Y los frenos? Cuentan con el sello M y montan pinzas de seis pistones. Resultan básicos para que un coche que gana velocidad con tanta facilidad y que genera tantas inercias se pare donde tu deseas.

Antes decía que no le puedo poner pegas a su motor. Quizás el consumo, porque pese a que declara 11,1 litros de media, en esta primera prueba, sin llevar una conducción especialmente agresiva, el ordenador de viaje se acercaba peligrosamente a los ¡20 litros! Aunque eso seguro que es lo de menos para quien pueda permitírselo, pero no por ello hay que menospreciar tan exagerado dato.

Ya solo me queda por comentar la postura de conducción, que es más elevada de lo que debería ser en un deportivo, incluso en su posición más baja, pero que gracias a sus formidables asientos deportivos de cuero con ajuste eléctrico y calefactables (de serie) te sientes integrado desde el primer momento. Una vez acomodado en el interior, veo frente a mi un salpicadero que al margen de su llamativo acabado de color rojo y los logotipos M, no difiere en exceso del resto de la gama.

El BMW X5 M cuesta 136.900 euros. No creo que en España vayan a vender demasiados, ya que parece más enfocado a millonarios rusos y acaudalados árabes. No obstante, hay que aplaudir como se merece el trabajo de los chicos de la factoría M de BMW, porque conseguir que una mole de este tamaño muestre maneras de deportivo es todo un logro.

Valoración

Nota9

El BMW X5 M 2015 es todo un peso pesado, pero cuenta con una puesta a punto sensacional que le ayuda a moverse como el mejor de los deportivos y, gracias a su motor

Lo mejor

Prestaciones del motor y comportamiento dinámico en curva

Lo peor

El peso del conjunto resulta demasiado elevado para las pretensiones deportivas

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.