Qué coche me compro en 2016
Nacho de Haro
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Después de la vivienda, el automóvil es la mayor inversión que realizaremos a lo largo de nuestra vida. Una mala decisión podría tener consecuencias nefastas para el bolsillo, por este motivo es fundamental acertar al elegir qué coche comprar. Pero los tiempos cambian y ya no es suficiente con resolver las cuestiones más tradicionales, como si nos conviene más que sea diésel o gasolina. A la hora de tomar esta decisión también deberías tener en cuenta situaciones que hasta ahora no se daban, como los nuevos protocolos anticontaminación que están aplicando ciudades como Madrid.
Otro factor determinante que, con la salida a la luz del escándalo de emisiones de Volkswagen, se ha convertido en el foco principal de atención, tanto de los medios de comunicación como de los usuarios, es el de la posibilidad de que estemos próximos al fin del diésel como el combustible más popular para propulsar turismos. Aunque los expertos ya nos han advertido de que el diésel tiene un problema serio, esta cuestión no debería preocuparnos a la hora decidir qué coche comprar en 2016, pues de llegar a producirse, probablemente no sería a corto o medio plazo.
Sin embargo, la elección de un tipo de fuente de energía u otro sí que puede alterar la forma en la que utilizaremos nuestro próximo vehículo, especialmente si resides o trabajas en grandes urbes con altos niveles de contaminación y que por tanto, en cualquier momento podrían aplicar restricciones. En ese caso, también lo deberías tener en cuenta para elegir qué coche me compro. En Madrid, por ejemplo, aunque no te podrás librar de limitaciones como la de la velocidad, sí que podrías ‘salvarte’ de los días que haya restricciones de tráfico o de aparcamiento si optas por un vehículo eléctrico, como puede ser el Kia Soul EV, o por un híbrido enchufable, como puede ser el Mitsubishi Outlander PHEV.
Pero como decíamos al principio, los tiempos cambian, la tecnología avanza y en el caso del automóvil lo hace, además, a pasos agigantados. Y no lo decimos únicamente por cuestiones referidas a la seguridad, al equipamiento o a las capacidades que tienen o tendrán los vehículos en un futuro, con los coches autónomos a la vuelta de la esquina, también están por llegar nuevos sistemas de propulsión. Hasta ahora no podías haber barajado la posibilidad de comprar un coche que utilizara el hidrógeno como fuente de energía, pero eso va a cambiar en 2016 con la introducción del Toyota Mirai, el primer vehículo de producción en grandes series con pila de combustible.
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Esto se suma a las cuestiones más tradicionales, que siguen siendo igualmente importantes. A la hora de comprar coche, dada la amplísima variedad de marcas, modelos y versiones que hay en el mercado, lo primero que hay que hacer es acotar la búsqueda, especialmente si no quieres volverte loco. Por ello es básico elegir de entre todos los segmentos el que más se adecúe a nuestras necesidades y una vez tengamos esto claro, ver qué modelos son los que encajan mejor con nuestro presupuesto. Este punto es clave a la hora de decidir qué vehículo comprar, ya que si optas por ejemplo por un monovolumen de siete plazas o por un gran SUV y en la mayoría de ocasiones viajas solo, literalmente estarás malgastando tu dinero. A no ser, claro está, que lo adquieras para darte un placer o un capricho.
También es importante no volverse loco con los elementos opcionales una vez sepamos qué coche vamos a comprar y elegir solo aquellos que realmente necesitemos o creamos que vamos a usar más. Es cierto que si eliges bien, hay extras que pueden aumentar el valor de reventa de tu coche, pero debes tener claro que son casos muy contados y que si te pasas, difícilmente recuperarás el dinero invertido. Más razón todavía para asegurarte de que solo seleccionas aquellos que verdaderamente usarás.
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