Salón de Ginebra 2015: El Quant F, llega la evolución

Hace un año, la compañía resultante de la alianza entre Koeniggseg y NanoFlowcell revolucionó el mundo del automóvil y levantó muchas suspicacias entre sus rivales, porque un coche movido por agua de mar –dicho de manera tosca- parece más un sueño que una realidad. Pues bien, ante el inminente Salón de Ginebra 2015, se prepara ya la evolución del Quant e-Sportlimosine, el Quant F. Te pido un favor: échale un vistazo a la galería del modelo presentado en 2014 y revises las imágenes del sucesor, a ver si encuentras alguna diferencia porque yo no he sido capaz.

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Eso sí, el nuevo Quant F sí mejora considerablemente las prestaciones del e-Sportlimosine, aunque ambos se basan en la misma tecnología de NanoFlowcell. Básicamente, una pila formada por dos electrolitos líquidos y separados por una membrana semipermeable que permite el flujo de electrones. Esta clase de ‘combustible’, que es básicamente agua con sales, resulta completamente inocuo para le hombre y la naturaleza, por lo que se puede usar gran parte del volumen del coche para su almacenaje.

En el caso de la berlina Quant F, su capacidad llega a los 500 litros, dividos en dos depósitos para repartir el peso de forma equitativa y evitar los vaivenes de la carga. Gracias al incremento en el volumen de almacenaje, el F es capaz de una autonomía de 800 km, 200 más que el e-Sportlimosine. Pero es que el nuevo modelo de Quant también es más potente, su fabricante afirma que puede alcanzar picos de potencia de hasta 1.090 CV y una velocidad máxima de más de 300 km/h.

Esto se consigue gracias a un nuevo impulsor de potencia que eleva la intensidad de la entrega eléctrica de los 50 amperios a los 200 amperios de máximo. Otra de las novedades del Quant F es que ahora ofrece una tracción total permanente que, en determinadas condiciones de rodaje, es capaz de desconectar por completo el eje delantero. A esto se le une un alerón trasero, que se eleva automáticamente cuando el vehículo supera los 80 km/h. Nada chicos, se nos acumula el trabajo para el Salón de Ginebra.