Sale a subasta parte de la colección del Príncipe Rainiero

Parte de la colección de clásicos del Príncipe Rainiero de Mónaco va a ser subastada por la casa Artcurial tras el encargo de su hijo el Príncipe Alberto. Esta colección se puede visitar en el museo que la casa real monegasca posee en las Terrazas de Fontvieille, en el centro de Mónaco, lugar en el que se celebrará la subasta el próximo 26 de julio.

Sin embargo, no hay que dejarse engañar por la procedencia de la colección, y no saldrá a la venta ningún Ferrari o Rolls de precios estratosféricos, como nos tienen acostumbrados últimamente las casas de subastas. No hay grandes precios, y casi tampoco grandes marcas, a excepción de Mercedes y Bentley. Los más caros tienen un precio de salida estimado en 35.000 euros, y son un  Bentley S1 berlina de 1956 y dos veteranos de principios del Siglo XX de la marca francesa Panhard-Levassor.

El resto son vehículos populares cuyo precio medio se sitúa en torno a los 12.000 euros, aunque en la lista de Artcurial podemos encontrar desde un básico Volkswagen Escarabajo 1600 injection de 1976 hasta todo un Chrysler Six de 1930 con unos precios que oscilan entre los 4.000 y los 6.000 euros.

Marcas como Citroën, Dodge, Peugeot o Renault son los protagonistas de la subasta, e incluso el único Mercedes presente, un 500 SEC AMG de 1983 que fue el vehículo personal del Príncipe Rainiero, tiene un precio estimado entre 15.000 y 25.000 euros. La valoración de los 38 clásicos que salen a subasta se puede considerar de realista o ajustada, sobre todo si se tiene en cuenta que estos clásicos proceden de uno de los garajes más famosos del mundo, donde todos ellos fueron perfectamente restaurados.

Sin embargo, el museo de Mónaco -que alberga actualmente los más de 100 clásicos que el Príncipe Rainiero fue atesorando durante más de 30 años- seguirá abierto al público, pues esta subasta de 38 coches obedece al "desarrollo de la colección", según ha comunicado el propio Príncipe Alberto. Es de suponer que el motivo no ha sido económico, pues ha trascendido que él mismo posee una fortuna personal valorada en unos 900 millones de euros, lo que supone más del doble de lo que se atribuye a la reina de Inglaterra.