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Rossi cumple 38 años con el 10º título entre ceja y ceja

Rossi cumple 38 años con el 10º título entre ceja y ceja

Diego de Arístegui

Valentino Rossi cumple 38 años con el 10º título entre ceja y ceja. El piloto italiano es un auténtico ejemplo de superación y amor por el deporte que ha de inspirar tanto a grandes como a pequeños.

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Valentino Rossi cumple 38 años con el 10º título entre ceja y ceja. Ese fue el motivo por el que decidió volver a Yamaha en el año 2013 tras dos temporadas aciagas en Ducati que a punto estuvieron de poner el punto y final a su carrera deportia en el Mundial. Regresar a la fábrica con la que había conquistado sus últimos títulos en MotoGP fue una inyección de moral para volver a ser un piloto competitivo, pese a estar cada vez más cerca de cumplir los 40. 

El italiano tiene contrato hasta 2018 y aunque haya gente que crea que después de estos dos años podría dejar MotoGP, lo cierto es que todo va a depender del nivel de competitividad que muestre y la motivación que el propio Valentino tenga dentro de sí para seguir viajando por todo el mundo en busca de batir a jóvenes pilotos como Maverick Viñales o Marc Márquez, los llamados a ser los grandes dominadores de la clase reina en los próximos alos. 

Lo que sí parece cierto es que el 10º título está siempre dentro de la cabeza de Rossi. Conseguirlo sería poner el broche perfecto a una carrera deportiva de ensueño y a buen seguro le haría aún más merecedor de ser el mejor piloto de la historia del Mundial, porque conseguir la décima corona casi 10 años después de lograr su último título es algo que está al alcance de muy poca gente. 

Nadie duda de que en otra época y con rivales menos exigentes, Rossi podría haber incrementado su nómina de títulos sin ningún tipo de problema. Muestra de ello son los tres subcampeonatos consecutivos que acumula en 2014, 2015 y 2016. La progresión es evidente y aunque quizás le falte un poco más para ser siempre una amenaza para Marc Márquez, lo cierto es que necesita muy poco para ser competitivo y siempre sorprende con su rendimiento. Es una mosca detrás de la oreja que sólo hace ruido cuando de verdad va a hacerte daño. En 2016 pudimos ver esto en las carreras de Jerez o Montmeló, donde tanto Lorenzo como Márquez tuvieron que rendirse ante el empuje del Doctor. 

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En 2017 será muy importante que Rossi consiga resultados positivos desde el inicio de temporada y que sea consciente de que no siempre ganar es la mejor opción, algo en lo que Marc Márquez impartió una clase magistral en 2016. Con tanta igualdad en MotoGP será difícil mantener siempre los pies en la tierra y pensar encima de la moto, pero seguramente esa capacidad vuelva a ser la clave que ponga la balanza en favor de uno u otro piloto. 

Valentino Rossi, con las 38 primaveras recién estrenadas, está más fuerte que nunca y con más hambre por conseguir eso que empezamos a considerar una obsesión sana, su décimo título. Es de los pocos pilotos que no tiene que demostrarnos nada ya, porque por el simple hecho de seguir poniendo a aprieto a chavales de 21-25 años, merece el respeto de todos los que amamos este deporte y de la vida en general. ¡Felicidades Vale!

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