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¿Por qué estas tres preguntas resuelven cualquier problema?

¿Por qué estas tres preguntas resuelven cualquier problema?
Existen tres preguntas cuyas respuestas pueden ayudarte a resolver cualquier problema. Cualquiera. Ya sea personal o laboral, estas tres cuestiones te ayudarán a enfocar el dilema de la manera adecuada. ¿Quieres descubrirlas? Sigue leyendo.

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Aunque no lo creas, existen tres preguntas que pueden resolver cualquier problema. Como lo lees. Sydney Finkelstein, profesor de Gestión y Dirección de la Tuck School of Business del Dartmouth College (Reino Unido) explica cuáles son estas cuestiones, y por qué son la clave de cualquier embrollo..

Tiene tres preguntas que suele usar en las consultorías con ejecutivos y que pueden ayudar a resolver cualquier problema; de negocios, o de la vida.

Hagamos la prueba. Piensa en un lío que tengas entre manos, algo que te agobie, lo que sea. Ahora, contéstate con honestidad a estas tres preguntas:

Tres preguntas que pueden resolver cualquier problema

1. ¿Realmente quieres cambiar lo que haces?

No lograrás ningún reto hasta que no respondas "sí" a esta cuestión. Piénsalo. ¿Cuántas empresas se gastan fortunas en intentar cambiar, cuando, en el fondo, no desean modificar nada? Y, ¿qué me dices de esa intención eterna de cuidarte más? Olvídate de todas las promesas que sueles hacerte ("no tengo tiempo", "Empezaré mañana"…); la verdadera razón por la que no vas al gimnasio o comes mejor es porque no quieres.

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2. ¿Se te ocurre una idea o estrategia mejor que la actual?

Incluso si te mueres de ganas por cambiar algo, lo importante es tener una idea para resolver el problema actual. A veces es bastante fácil; puedes llevar una vida más sana si comes mejor o haces deporte, por ejemplo.

Otras veces, en cambio, es más difícil. En estos casos, las empresas (o las personas) pueden llegar a gastarse millonadas en consultoras que les den soluciones a sus problemas; pero no habría que descartar la idea de preguntar a tus allegados (o a tus compañeros de trabajo).

s decir; ten la mente abierta, curiosidad por las cosas, busca la creatividad, y las opciones se multiplicarán.

3. ¿Puedes llevar a cabo la solución?

He aquí el 'quid' de la cuestión. No importa lo maravillosa que sea tu idea; si no puedes ejecutarla, no sirve de nada

Y, para ello es necesario un plan de acción, que especifique los pasos que se han de dar. Incluso ir al gimnasio y empezar a comer mejor requiere de una estrategia; contar con un compañero o un entrenador personal que te motive, un dietista que te explique platos ricos y saludables…

Como ves, sea cal sea el problema que tengas, estas tres preguntas te ayudarán a tener un plan de acción claro, con el que resolverlo.

Fuente: BBC

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