Logo Autobild.es

De Mini para Porsche: ¡Felicidades!

De icono a icono: el Mini clásico felicita al Porsche 911 por su 50 aniversario. Para ello, el clásico inglés, que se presentó en 1959, se ha vestido casi con el mismo traje que el deportivo de 1963.

Se acerca el aniversario del Porsche 911, uno de los grandes iconos del automóvil. Un deportivo cuyas líneas se han mantenido a lo largo de 50 años de vida comercial. Y contra toda lógica, también ha mantenido una arquitectura que a priori podría parecer arcaica: motor y propulsión trasera era algo que montaban los 600 o los R8 hace 40 años. Pero eso no ha impedido que generación tras generación su comportamiento se encuentre entre los mejores.

 

Mini 1000 y Porsche 911T 1963

Otro mito sobre ruedas es el Mini clásico. Se presentó el 26 de agosto de 1959 bajo el paraguas de la British Motor Corporation (BMC) bajo dos denominaciones: Morris Mini-Minor y Austin Seven. De este pequeño ciudadano salido del lápiz de Sir Alec Issigonis se vendieron 5,3 millones de unidades hasta el año 2000, cuando dejó de fabricarse (por aquel entonces estaba en manos de la marca Rover). Ahora es propiedad de BMW como marca independiente y sigue llena de vida con una gama que tiene desde coupés descapotables hasta todoterrenos 'light'. Además, hace poco se destapó el que será el Mini Cooper S 2013 en Inglaterra.

 

Del Porsche 911 poco más se puede decir. Vio la luz en 1963 con el nombre 901 (hasta que Peugeot hizo valer la patente que tenía sobre todos los números de tres dígitos con un cero en el medio) y hasta el momento lleva vendidas más de 800.000 unidades. Una cifra nada mala.

Ahora, ambos mitos del automóvil celebran una historia plagada de similitudes, que, aunque a primera vista no lo parezca, existen. Obviando las diferencias (por ejemplo, el Mini clásico tiene el motor en la parte delantera, y el Porsche 911 en la trasera), los parecidos entre el Mini clásico y el Porsche 911 existen; por ejemplo, ambos modelos consiguieron alcanzar la popularidad muy rápidamente (el Mini se convirtió en el coche de moda tras la austeridad de los años 50; y el Porsche 911, sucesor del Porsche 356, nació con la fama en la sangre).

Además, pocas son las marcas y modelos que pueden presumir de ser, aún hoy, tan icónicas. Ni de haber sabido mantenerse tan bien con los años. Ni el Porsche 911 ni el Mini dejaron que el tiempo y los cambios tecnológicos los abrumaran, y se fueron adaptando a su tiempo, causando auténtico furor en todas y cada una de sus versiones.

Ahora, que Porsche llega a la cincuentena como muchos desearíamos, Mini 'emula' a Porsche, y le homenajea de esta forma tan especial. ¡Felicidades!


Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.