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McLaren X-1 Concept, excéntrica exclusividad

La división encargada de los proyectos personalizados de la firma de Woking ha presentado este McLaren X-1 Concept en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach, durante este fin de semana. Está basado en el 12C y solo existe una unidad, que ha sido diseñada para un cliente anónimo.

McLaren Special Operations (MSO) -encargados de proyectos a medida de la marca inglesa-, ha presentado este fin de semana el McLaren X-1 Concept en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach, Monterrey. Un coche único basado en el McLaren MP4-12C y diseñado en exclusiva para un acaudalado cliente anónimo.

Sobre este comprador poco se sabe. Únicamente que debe tener una cuenta corriente ‘saneada’, ya que posee también un McLaren MP-12C ‘de los normales’, un SLR McLaren y hasta todo un McLaren F1. No ha trascendido nada más sobre su identidad ni su residencia, que, a la vista de las fotos del modelo, quizá pudiera ser Transilvania. Quién sabe.

Bromas aparte, y sin entrar a juzgar la cuestionable estética de este exclusivo proyecto, lo que sí podemos imaginarnos es su precio, ya que a la vista de anteriores trabajos personalizados, como el Ferrari de Eric Clapton, el precio de este ‘capricho’ podría incluso multiplicar por tres el precio base del coche en el que se basa.

El McLaren X-1 Concept utiliza la misma estructa MonoCell de carbono que su hermano, que pesa únicamente 80 Kg. Exteriormente todo cambia. La carrocería, fabricada enteramente en fibra de carbono, consigue que su peso se mantenga prácticamente en los mismos 1.400 kilográmos que pesa el superdeportito inglés, pese a haber crecido ligeramente a lo largo y a lo ancho, 109 y 188 mm, respectivamente.

Cuando el 'misterioso' cliente acudió a los especialistas de McLaren, hace ahora más de dos años y medio, pidió una máquina con las capacidades de un 12C (su mecánica es en esencia la misma, un twin-turbo de 625 CV) pero con una carrocería única que reflejara sus necesidades y su personalidad, a través de un diseño clásico y atemporal. El diseño de su estética finalmente mantuvo a los especialistas de Woking ocupados durante año y medio. Para ello se inspiraron no solo en diseños automovilísticos como el del Facel Vega de 1961, el Buick Electra, el Mercedes 540K de 1939 o el Citroën SM del 71, sino en corrientes arquitectónicas como la de los museos Guggheim de Nueva Cork o Bilbao, una pluma Montblanc o hasta una foto en blanco y negro de Audrey Hepburn.

El diseño final ha sido obra del diseñador Hong Yeo con el resultado que puedes ver arriba. Un deportivo de estilo completamente anacrónico, que en el exterior comparte únicamente el parabrisas con su coche de orígen. Tiene las ruedas traseras carenadas (los paneles que las tapan pueden desplazarse hacia arriba, por si te preguntabas como se cambiaban en caso de pinchazo o desgaste) y un color negro piano acabado en níquel.

El interior de esta excéntrica personalización utiliza cuero Harissa Red Nappa y todas sus inserciones de firba de carbono cuentan con lacado de titanio para darle un efecto 3D ‘mágico’.

Si a Drácula le gustaran los superdeportivos…

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