Logo Autobild.es

Marc Márquez salva la primera bola de partido del 2017

Marc Márquez salva la primera bola de partido del 2017

Diego de Arístegui

Marc Márquez salva la primera bola de partido del 2017. El de Cervera estaba obligado a ganar y lo hizo en una carrera donde tuvo que gestionar mucho la primera mitad de la prueba, antes de adelantar a Dani Pedrosa e imponer su ritmo ganador.

Valentino Rossi tiene el Mundial justo en el punto donde él más quería

Marc Márquez salva la primera bola de partido del 2017. El vigente campeón hizo de la estabilidad su mejor arma la temporada pasada pero este año, en la segunda cita del campeonato, sumó su primer cero y empezó la defensa del título completamente a contracorriente. Con su triunfo ayer en Austin el panorama se despeja más para un Márquez que llegará a Europa con la necesidad de intentar poner en jaque a las dos Yamaha. 

Si en 2016 el de Cervera llegó a Jerez con margen sobre Rossi y Lorenzo en un territorio poco propicio para las Honda, este año será al revés. Si la Honda sigue dando síntomas de debilidad respecto a la Yamaha, Márquez sufrirá en circuitos donde tanto Viñales como Rossi serán mucho más competitivos que en las tres primeras citas del campeonato. 

Pese a que terminó con cierta ventaja sobre Rossi ayer en carrera, la de Austin fue una de sus victorias más complicadas. Durante la primera mitad de carrera tuvo que ir tras Dani Pedrosa intentando comprender el comportamiento del neumático duro con el que no había hecho ninguna prueba de larga duración durante todo el fin de semana. Cuando pasó a la acción y adelantó a Pedrosa, este le devolvió el adelantamiento y tuvo que pensárselo mejor. 

Volvió a ponerse en cabeza y durante dos o tres vueltas parecía que Pedrosa le iba a aguantar el ritmo hasta el final del Gran Premio. Sin embargo en ese momento Marc bajó el ritmo al 2:04 alto y ahí dinamitó la prueba en su favor. Pedrosa destrozó sus neumáticos y al final cedió ante Valentino Rossi, aunque el italiano nada pudo hacer para dar caza al piloto español. 

Un triunfo casi obligado para un Márquez que ahora deberá optimizar al máximo sus posibilidades en las primeras carreras que se disputarán en suelo europeo. El año pasado no ganó hasta Sachsenring y por el camino sumó una caída en Le Mans. Está claro que no es la parte del Mundial en la que mejor se siente el piloto de Cervera pero con tres coronas de campeón del mundo en cuatro temporadas nadie puede dudar que estará ahí poniendo en jaque a las dos Yamaha, que se vislumbran como las grandes favoritas. 

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.