Los nuevos alcaldes no van en coche

Cuando Pedro Sánchez asumió el liderazgo del PSOE eliminó todos los coches oficiales del partido. Todos, menos el suyo, un Ford Focus que mantuvo por cuestiones de seguridad. Fue él uno de los primeros en adelantar un cambio que muchos prometieron en campaña electoral y que unos cuantos ya han hecho realidad: los nuevos alcaldes que no van en coche.
En esta lista de alcaldes sin coche oficial (por el momento) hay nombres como el de Joan Ribó. El alcalde de Valencia no ha querido seguir el ejemplo de su antecesora, Rita Barberá, que aparcó su coche particular y lo dejó 23 años abandonado en el ayuntamiento mientras hacía uso del vehículo oficial. Ribó ha entrado en el consistorio valenciano renunciando al coche oficial y a la escolta que tenía la anterior alcaldesa; dice que irá al trabajo a pie, en bicicleta o en bus y que los 25 agentes de policía que estaban al servicio de Barberá volverán a patrullar por las calles.

"Quiero estar en contacto con la gente, no necesito ni coches oficiales para cada desplazamientos ni escoltas todos los días las 24 horas, no quiero estar aislado en una burburja", ha dicho Ribó.

Adiós a los coches oficiales en la Barcelona de Ada colau

Comparte esta opinión la nueva alcaldesa de Madrid. Manuela Carmena se mueve habitualmente en Metro en sus desplazamientos y asegura que piensa seguir haciéndolo.

Cuando todavía no había sido investida alcaldesa de la capital, Carmena aseguró que su intención era seguir yendo a trabajar en transporte público. Lo dijo pocos días antes de sufrir un pequeño accidente que le costó la rotura de un tendón del hombro cuando al salir del vagón un joven la empujó. A pesar de eso, ayer mismo, primer día de su legislatura volvió a coger el metro en la estación de Arturo Soria para llegar al Palacio de Cibles donde tiene su nuevo despacho.

Habrá que ver qué hace con el protocolo anticontaminación creado por Ana Botella.

Fuente: El Mundo, El País, 20 Minutos.

Foto: Ayuntamiento Madrid