Lewis Hamilton corrió sin agua el GP España de F1
Con el objetivo de ser más rápido y degradar menos los neumáticos pesando menos, Lewis Hamilton decidió no llevar botella de agua en el cockpit de su monoplaza durante el Gran Premio de España de Fórmula 1. Aunque ganó la carrera, pudo salirle caro, y muestra de ello es que vio la bandera a cuadros tremendamente cansado.
Cualquier mínima diferencia de rendimiento entre los dos monoplazas punteros de la parrilla, ahora Mercedes y Ferrari, puede hacer que uno de ellos se sitúe por delante del otro y, por tanto, pueda batir a su rival. Hamilton y Mercedes quieren volver a triunfar esta temporada y por ello el británico decidió no llevar botella de agua en su monoplaza para que éste pesase menos.
Hamilton, por tanto, no pudo hidratarse durante la carrera y eso provocó que se cansara más de lo normal. De hecho, cruzó la línea de meta después de 66 vueltas asegurando que estaba realmente agotado. Cree que perdió alrededor de dos kilogramos… ¿ganó lo suficiente como para volver a repetirlo?
“Es probable que perdiera dos kilos en la carrera. Me encontraba bastante cansado cuando acabó. Lo di todo y lo hice para ahorrar peso. Mi pulso alcanzó el máximo… No sé si lo haré de nuevo, estoy muy cansado”, ha declarado Hamilton.
Si bien en Barcelona el domingo fue un día bastante caluroso, con 46 grados en el asfalto, en otros circuitos como Malasia o Singapur – donde las temperaturas son mucho mayores - la hazaña de Hamilton sería mucho más peligrosa y seguro que nada recomendable por sus entrenadores físicos.
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