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Desde 21.290 euros, hasta 24.490, con dos motores de gasolina. Habrá que esperar hasta febrero del año que viene para que el propulsor diésel 1.6 de 115 CV se una a la gama; de momento, el monovolumen ofrece espacio, habitabilidad y múltiples posibilidades de configuración. ¿Cómo acceder a todo ello? A través de unas prácticas puertas correderas.

En AUTOBILD.ES ya te hemos hablado del Mazda5, un monovolumen de líneas fluidas -así lo afirma la marca nipona- basadas en el lenguaje de diseño “Nagare”, que presenta dinamismo y movimiento. Por supuesto, el coche adopta la nueva imagen del fabricante y aporta un pilar D oculto, llantas de aluminio de 16 y 17” y un nuevo color (Clear Water Blue) para la carrocería.

En el interior, el salpicadero y la consola central se han orientado hacia el conductor, que cuenta con un mejor ajuste de los asientos y un amplio campo de visión. Además, la pantalla de información se ha situado a mayor altura, con el fin de reducir el movimiento de los ojos para consultarla y, por lo tanto, disminuir las distracciones al volante. Un nuevo aislamiento acústico, un espacio para las piernas de los ocupantes de la segunda y tercera fila entre los mejores del segmento (según Mazda) y banquetas reclinables y deslizantes completan un conjunto pensado para que los viajes se realicen con la mayor comodidad posible.

En este apartado destacan las dos puertas correderas traseras o un habitáculo que puede configurarse a voluntad: siete plazas, cinco, cuatro, dos... Si escoges esta última opción, tendrás un espacio para la carga de 1.485 litros, que se reduce a 780 si escondes la tercera fila de asientos.

Por supuesto, la seguridad no se deja de lado: un nuevo sistema de señalización de la parada de emergencia (ESS, en sus siglas en inglés) alerta a los vehículos que circulan tras el Mazda sobre frenadas repentinas mediante la activación automática del warning.

Nuevo motor
El Mazda5 estrena el motor de gasolina 2.0 DISI equipado con el dispositivo i-stop. Esta mecánica ofrece 150 CV y reduce el gasto de carburante un 13% respecto al anterior propulsor de dos litros, dejando la cifra en 6,9 l/100 km. Las emisiones también bajan un 15%, hasta los 159 g/km. ¿Cómo se han conseguido estas cifras? Entre otros elementos, gracias al nuevo indicador de cambio de marchas.

Este monovolumen también contará con el motor 1.8 de 115 CV que, por primera vez, se asocia a una transmisión manual de seis velocidades. Ha recibido varias actualizaciones con el fin de disminuir el consumo y las emisiones: con 168 g/km, se ajusta a la normativa Euro V. Más adelante llegará una mecánica diésel 1.6 de 115 CV.

Estos propulsores moverán un vehículo dotado de un dinamismo muy equilibrado, según el fabricante japonés. De hecho, asegura que las sensaciones al volante mejoran debido a la revisión que se ha llevado a cabo en la suspensión y la dirección.

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