Paran a un conductor ebrio y dice que conducía su perro
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Noticias como esta nos alegran el día a cualquiera. Un conductor ebrio que se saltó un semáforo, al intentar escapar de la Policía para no someterse al control pertinente de alcoholemia y finalmente chocó contra una casa, aseguró a los agentes que no estaba conduciendo el vehículo, que en su lugar lo hacía su propio perro.
Tras la colisión y antes de ser finalmente arrestado, el conductor abandonó el lugar del accidente e intentó huir entre las casas para esconderse en una iglesia. El propio pastor de la iglesia dio la voz de alarma a las autoridades, quienes se encargaron de proceder a la detención.
Poco después, el conductor comenzó a vomitar, explicó su visión del accidente, y los agentes declararon que el vehículo olía a alcohol y sustancias estupefacientes. No se halló ningún perro en el lugar del accidente y ahora se enfrenta a cargos por conducción bajo los efectos del alcohol, fuga con agrabante y abandono del lugar del accidente.
Fuente: Gawker.com
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