Comparativa SUV: nuevo Skoda Karoq contra todos
Se acabó la forma de vehículo de carga del Yeti. Aquí llega el atractivo Karoq. El nuevo mini SUV de Skoda se enfrenta aquí, en su primer lance, a lo más granado de la categoría: Mazda CX-3, Honda HR-V, Renault Captur, Toyota CH-R y Opel Crossland X. Comparativa: Skoda Karoq vs rivales.
Empecemos aclarando qué significa CH-R. Toyota nos lo explica: Coupé High Rider. Y va como anillo al dedo a este coupé espacial: es un coche para destacar. La funcionalidad y usabilidad, son aquí cosas complementarias.
Los tiradores traseros se ocultan en los pilares C, el techo cae hacia atrás como en un coupé, detrás uno no va incómodo, pero el acceso a través de sus pequeñas puertas no es muy fácil. Debido a las pequeñas ventanas y los gruesos pilares C, la visibilidad es un tanto precaria. Tampoco facilita mucho las labores de carga: con 785 mm de altura, tiene la boca más elevada, junto al Mazda cx-3.
En el capítulo de variabilidad no puede rascar muchos puntos: uno de su respaldo abatible asimétricamente, otro porque la operación se hace con una palanca. Eso sí: el diseño de este coche nos ha cautivado.
Puesto: 6, con 57,5 puntos de 100.
VIDEO: Esto pensamos del Mazda CX-3
La cara típica de la marca y sus típicas líneas dinámicas laterales. Esta carrocería es toda una declaración de diseño, con un aspecto tan logrado y atractivo que, desde que salió en 2015, el resto de los modelos nuevo de la marca han ido adoptando su lenguaje.
Al volante, el pequeño SUV de Mazda sorprende con un dinamismo y la elevada seguridad que transmite. Y por dentro, nos gusta el manejo sencillo de los elementos de control, la buena funcionalidad y una postura de los asientos muy cómoda.
Lo penalizan pequeños detalles como una boca de carga demasiado elevada, y el precio de algunos extras como el Tempomat o el reconocimiento de señales de tráfico. La variabilidad es notable, con respaldos abatibles asimétricamente y un suelo de carga plano, que además es doble. Pero no tiene la banqueta trasera deslizable, algo en lo que brilla el Renault.
Puesto 5 con 59,5 de 100 puntos.
Es un SUV con los ingredientes que atraen a tantos clientes en este segmento: postura elevada al volante y carrocería compacta de aspecto aventurero, aunque no tiene disponible tracción integral. El acceso a su cockpit, con asientos de 645 milímetros de alto, es realmente sencillo, y la postura, muy confortable.
Lo que no nos ha gustado es que elementos como la banqueta trasera deslizable y el doble suelo de carga cuesten extra. Y la boca de carga, es más elevada de lo deseado. El comportamiento sí nos ha convencido, muy equilibrado: aplomado y ágil en curvas, cómodo en carreteras amplias, con un buen filtrado de suspensiones. Y los acabados interiores rayan a buena altura.
Puesto 4 con 62 de 100 puntos.
En comparación con el Yeti, aumenta su longitud en 16 centímetros, hasta los 4,38 metros. Para que te hagas una idea: la altura y anchura, están ahora al nivel de un Seat Ateca. Lo cual es lógico, porque comparten plataforma, y los dos se producen en la misma planta checa.
Por dentro, tiene muchos paralelismos con su hermano mayor, el Skoda Kodiaq, y se beneficia por tanto de un buen sistema de infotainment y conectividad. Y por primera vez, Skoda ofrece la posibilidad de equipar un cockpit digital, que cuesta un extra. De su antecesor hereda el práctico sistema de asientos Vario-Flex con tres plazas independientes que no solo se regulan individualmente; también se pueden desmontar. Por desgracia, no viene de serie. El comportamiento, con un chasis tirando a firme, es aplomado, aunque filtra bien y ofrece cierto grado de confort.
Puesto 3 con 63,5 de 100 puntos.
Lo que nos ha encantado es que lleva los fabulosos Magic Seats del Jazz a bordo, y con eso puntúa muy alto en variabilidad: es realmente fácil plegarlos, y que quede una superficie de carga plana. Tiene la boca de carga más baja, lo que lo vuelve muy práctico, su amplias puertas, unidas a unos umbrales bajos, facilitan enormemente el acceso al interior. Por desgracia, tiene al radio de giro mayor, y el uso del sistema de navegación requiere un periodo de adaptación.
Puesto 2 con 69 de 100 puntos.
Lleva cuatro años en el mercado, y por eso es uno de los primeros mini SUV del segmento. Acaba de recibir un facelift, aunque la mayoría de los cambio son ópticos. Técnicamente, es realmente un Renault Clio elevado.
No puede llevar tracción integral, pero su alta postura al volante y sus precios contenidos lo hacen puntuar. No en vano, es el SUV más vendido en Europa de su segmento.
Y comprobamos por qué: ninguno ofrece un acceso tan confortable al interior, los umbrales están muy bajos y la apertura de las puertas es realmente amplia. La postura al volante es realmente confortable.
En cuanto al equipaje, lleva doble suelo de carga y tiene la boca de carga más baja de este test. También puntúa en variabilidad: la banqueta trasera deslizable es de serie.
Puesto 1 con 70,5 de 100 puntos.
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