Pierde el control del coche y acaba metido en una piscina
Nacho de Haro
No te pierdas: ‘Un texano estrena su Camaro ZL1 metiéndolo en una piscina’
Ya sabemos que las drogas y los jóvenes al volante son una mezcla explosiva y hoy te traemos otro ejemplo más que demuestra el peligro de combinar sustancias estupefacientes y coches. El conductor de un Volvo 940 perdió el control de su coche y acabó metido en la piscina de una casa en Suecia. Por fortuna, en el momento en el que se produjo el siniestro, sobre las 17:30 del pasado 7 de julio, no había nadie refrescándose y no hubo que lamentar heridos. Aquí puedes ver las imágenes del aparatoso chapuzón.
Y es que las autoridades locales creen, tal y como nos informan desde CarBuzz, que el individuo que acabó metiendo el coche en una piscina, al más puro estilo de Keith Moon, conducía bajo los efectos de algún tipo de sustancia estupefaciente. Al parecer, se salió de la calzada y recorrió más de 70 metros a través de los jardines de varias viviendas hasta que terminó cayendo al agua.
¿Sorprendido? Por increíble que parezca, no es el primer incidente de este tipo del que somos testigos. Si haces memoria tal vez recuerdes el que protagonizó un hombre de 85 años, que metió su Ford Mondeo en una piscina porque, supuestamente, su chancla se quedó atascada en el pedal del acelerador. Pero peor todavía fue el incidente de este Jeep Liberty, que se ‘coló’ con su 4x4 en una fiesta que estaban celebrando en una piscina.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.