Logo Autobild.es

Circula tan rápido que el radar no puede tomar sus datos

Circula tan rápido que el radar no puede tomar sus datos
¿Qué era eso? ¿Un coche? ¿Una moto? ¿Un avión? Tal cual fue lo que pensaron dos agentes de tráfico escoceses al sentir (que no ver) como un vehículo les pasaba a más de 223 km/h. El radar registró la cifra, pero la velocidad era tal que no tuvo tiempo de memorizar la matrícula. Total, que el conductor se fue de rositas.

Ojipláticos se quedaron los dos agentes de tráfico escoceses Los hechos sapostados en un control de velocidad al sentir (que no ver) un vehículo que circulaba a tal velocidad que ni el radar pudo registrar sus datos. Según el resultado del cinemométro, el vehículo en cuestión pasó por su lado a más de 223 km/h en un tramo limitado a 96. Lo cierto es que no lo cazaron, ya que la velocidad era tal que el radar no fue capaz de registrar datos más allá de la cifra del velocímetro. Vamos que tras casi triplicar la velocidad máxima permitida, el conductor se fue de rositas.

Pero la cosa no quedó ahí. Ninguno de los dos agentes (que no debían estar demasiado atentos) vió pasar al vehículo en cuestión, de hecho, creen que se trataba de una motocicleta pero tampoco pueden asegurarlo.

Aún así, los 223,7 km/h que calculó el radar no es la máxima velocidad que ha alcanzado un vehículo en ese tramo de carretera, el récord es para un coche que fue cazado circulando a 239 km/h (no sabemos si en esa ocasión fue identificado).

Los hechos sucedieron en Escocia, concretamente en la carretera comarcal M25.

Fuente: Motorpasionmoto

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.