Cinco lugares a los que viajar antes de tener hijos
1. Berlín, Alemania
No es que la capital alemana no se pueda visitar sin niños; de hecho, su oferta turística es tan amplia, que conocerla con pequeños es más que interesante. Pero la vida berlinesa bien merece la pena conocerse antes de ser padre; unas cervezas en Neukölln, un domingo de puestos callejeros por Mauerpark o la divertida nocturnidad de sus locales se viven de otra forma sin niños.
2. Templos de Angkor, Camboya
Angkor es una región de Camboya cuyos monumentos y templos se encuentran cerca de la actual Ciudad de Siem Riep, y fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1992. El templo más importante es el de Angkor Wat. Las largas caminatas (o paseos en bicicleta) que implica la zona se harán más cómodamente sin niños.
3. Venecia, Italia
Si hay un destino romántico por excelencia (con el permiso de París), ese es Venecia. Una joya italiana en la que iglesias, edificios, antiguos puentes, monumentos y plazas cuentan la vivacidad artística y cultural que marcó y marca todavía la historia de esta ciudad. Empezar desde la Plaza de San Marco a deambular por sus calles, perderse por sus rincones y canales se disfruta de otra manera si la escapada es para dos.
4. Antártida
El destino ideal de todo aventurero. Es el continente en el que se encuentra el Polo Sur. Por razones más que obvias (clima, terreno, economía), no es un destino apto para niños.
5. Carnaval de Salvador de Bahía
La festividad brasileña anual es, por razones también más que evidentes, un destino ideal para viajar cuando aún no se es padre. El evento dura, oficialmente, seis días, si bien las festividades se prolongan mucho más. Las celebraciones se suceden simultáneamente en varios sitios; las más famosas son Campo Grande, Barra-Ondina, y Pelourinho.
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