BMW utiliza pomelos para diseñar sus futuros cascos
Nunca se sabe donde se puede encontrar la inspiración para seguir mejorando: en el caso de BMW, como otros tantos, ha sido observando la naturaleza. La marca alemana se ha fijado en los animales y en las plantas para desarrollar el equipamiento de seguridad que dentro de poco utilizaran los operarios de varias de sus fábricas. Bajo el nombre de Bio-Inspired Safety Systems (BISS) se encuentra un proyecto que ha durado tres años y en el que además de la propia BMW han estado involucradas firmas como Adidas y centros de I+D de diversas universidades alemanas.
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El ejemplo más llamativo de esta nueva remesa de productos son los cascos basados en el pomelo. No quiere decir que vayan a estar fabricados con la fruta, pero si imitarán su estructura. Con una piel resistente pero tampoco muy gruesa, los pomelos cuentan con una capa interna bastante ancha y esponjosa antes de llegar a la pulpa. Esta les protege contra caídas incluso desde gran altura, ante las que ni el interior sufre mucho daño ni el exterior se raja.
Pero el reino animal también ha jugado su papel, y es que se han estudiado las propiedades de la piel, las escamas y los caparazones de diversos reptiles, incluidas tortugas, cocodrilos y caimanes. En base a ellos se han desarrollado prototipos no solo de cascos, sino también de guantes y protecciones para insertar en la ropa que son un 20% más ligeros y más resistentes que los utilizados actualmente.
Fuente: Carscoops.
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