Aston Martin Voyage 55: el yate de James Bond
Fíjate en la trasera. Los escapes están camuflados en lo que serían los pilotos traseros. Poco más abajo queda la línea de flotación. El Aston Martin Voyage 55, un concepto nacido de la pluma de Luiz de Bastos, recoge las señas distintivas de los modelos más famosos de Aston Martin. Este fueraborda solo es un prototipo, un simple trabajo de diseño a modo de homenaje a la marca inglesa.
Para este diseñador todo ha sido un reto, ya que un automóvil y una lancha de este tipo no se parecen mucho, por lo que insertar los elementos distintivos de los superdeportivos de Aston Martin no ha sido fácil. De hecho, según sus palabras, lo más complicado ha sido adaptar la típica parrilla de los modelos ingleses, ya que ningún barco dispone de radiador en su parte delantera y mucho menos se hace visible. Al final se optó por dar al parabrisas esa forma tan característica.
Los grupos ópticos funcionan a modo de luces de navegación, mientras que sobre lo que sería el capó se ha dibujado una gran ventana para iluminar el interior y de paso crear un gran solarium. Los asientos son de gran tamaño (se pueden convertir en cómodas tumbonas) y se accede a ellos a través de la parte central. La instrumentación y los mandos del Aston Martin Voyage 55 también están inspirados en los modelos de la empresa inglesa.
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