Así es el Circuito de Brno
Diego de Arístegui
El Mundial de MotoGP entra en las carreras decisivas, donde un error puede costar un título o gran parte de toda la temporada. Todos los que lo han hecho bien hasta ahora tienen en sus espaldas la presión de mantener el mismo nivel, mientras que los que no han estado tan delante como se esperaba tienen que espabilar si no quieren ver peligrar su futuro. Llegamos a República Checa, y así es el Circuito de Brno.
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Se trata de uno de los circuitos más duros del Mundial, tanto para los pilotos como para las motos. Su situación geográfica hace que el trazado esté repleto de desniveles, tanto ascendentes como descendentes. También es un circuito variado, con diversos tipos de curva, aunque la mayoría son onduladas, ni rápidas ni lentas, pero sobre todo técnicas. Un circuito de piloto, en todos los sentidos.
Un circuito enorme
Con casi 5,5 kilómetros de longitud, uno de los más largos del campeonato, comienza con una recta de poco más de 600 metros y esta es la más larga, donde los pilotos de MotoGP pueden llegar hasta los 315 km/h más o menos. La primera curva no es difícil a su entrada, pero su longitud y ondulación hace que sea tremendamente complicada de salir bien. Lo peor de todo es que si sales mal, comprometes la curva 2, que es una corta de izquierdas. Entramos en una nueva recta que desemboca en una frenada de izquierdas, que a continuación tiene su cambio de dirección a la derecha.
El trazado checo se caracteriza precisamente por estos numerosos cambios de dirección. Tras una nueva recta corta alcanzamos las curvas 5 y 6, que son prácticamente consecutivas. Después llega 7, a izquierdas y donde es muy importante tener un buen apoyo en el interior, porque sino la moto se marcha hacia fuera. Las curvas 8 y 9 son como una chicane, que da lugar a una nueva recta totalmente cuesta abajo.
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El último sector, vital
Tras llegar a lo más hondo del circuito, comenzamos la subida desde la curva 10, de derechas. A continuación llegamos a una curva importante, ya que según como tomemos esta, saldremos mejor en la siguiente curva, la 12, que da lugar a la recta de atrás, completamente en subida. Llegamos a las dos últimas curvas, donde la frenada de la 13 es tremendamente complicada porque es casi ciega. No es tan malo colarse porque la 14 es justo hacia el otro lado y permite recuperar. Sin embargo, una mala salida puede hacer que la carrera se te escape, tal y como le pasó a Jack Miller en 2014, que pasó de primero a quinto en 200 metros.
Un trazado para valientes, de piloto y no de moto, aunque en MotoGP muchos dicen que Brno le va mejor a la Yamaha que a la Honda. Rossi ha ganado 5 veces, Pedrosa 2, y a los dos les gusta. Márquez dice que no es de sus favoritos y Lorenzo no lo ha hecho mal pero tampoco ha terminado de ganar, así que el espectáculo está garantizado.
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