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Previo del Gran Premio de Mónaco

Carlos Flores

Llega la cita con la joya de la corona del Mundial de Fórmula 1: el Gran Premio de Mónaco. ¿Continuará la racha victoriosa de Sebastian Vettel y Red Bull, de nuevo favoritos? O, ¿podrán las peculiares características del circuito urbano por excelencia dar la vuelta a las expectativas y hacer que McLaren y Ferrari opten al triunfo?

Es hasta cierto punto paradójico. La temporada 2011 de Fórmula 1 está ofreciendo dosis de emoción y espectáculo en la pista que hacía tiempo que no se veían. Pero, más allá de la sobredosis de adelantamientos y la diversidad de estrategias, hay un piloto y un equipo que han arrancado la campaña tal y como finalizaron la anterior: dominando de forma casi avasalladora. Sebastian Vettel y Red Bull están siendo de momento una combinación difícil de batir. Pero llega Mónaco.

El circuito urbano por excelencia ha sido siempre la mayor prueba de valentía, precisión e improvisación. Sus estrechos confines han sacado a la luz las cualidades de los más grandes y es un hecho que, en sus poco más de tres kilómetros de asfalto, un buen piloto puede trascender las posibilidades de un coche inferior.

Este año, a los habituales desafíos de la pista se añaden los neumáticos Pirelli, el DRS y el KERS. No es previsible esperar un festival de adelantamientos como el de las carreras más recientes. Simplemente, no hay espacio. Pero es casi seguro que la corta vida de los neumáticos va a plantear muchos quebraderos de cabeza estratégicos a los equipos y a ofrecer buenas dosis de acción.

Dónde está la emoción

En Montecarlo, en cualquier parte. Antiguamente, la primera curva era más angosta y una auténtica trampa que casi siempre causaba víctimas en la salida. Desde que se despejó la zona interna, ofreciendo una escapatoria, los incidentes ya no son tan habituales. Pero lo cierto es que en ningún otro circuito los errores se pagan tan caros. En la inmensa mayoría de las curvas, el más mínimo despiste –que en otro lugar se resolvería con un paseo por la escapatoria y algunos segundos perdidos- significa un encuentro indeseado con las barreras y daños irreparables en el coche. En muchas, zonas, la trayectoria ideal supone pasar a milímetros de las vallas o los muros, y la distancia entre un marcar un tiempazo y ver como la grúa retira tu coche es increíblemente pequeña.

Adelantar siempre ha sido complicado. Incluso con la entrada en juego del alerón móvil y los neumáticos en distintas fases de degradación, es más que posible que este año la cosa no cambie mucho; las rectas son demasiado cortas y las curvas demasiado angostas. Si un piloto quiere consumar una maniobra, necesita una gran determinación y, muy probablemente, va a tener que ser muy expeditivo.

Las claves de Montecarlo

-¿Cómo funcionarán en Mónaco las ayudas al espectáculo? En España, la zona de activación del alerón trasero no resultó tan efectiva como en pruebas anteriores así que, en principio, no cabe esperar demasiado en Mónaco, con su minúscula recta de meta (que, para empezar, ni siquiera es totalmente recta). Y ojo con la utilización en la calificación, porque Montecarlo va a requerir bastante sutileza a la hora de activar un ingenio que modifica en un instante los niveles de agarre y resistencia al avance; hacerlo a destiempo implica grandes riesgos. En cuanto a los neumáticos, nadie sabe a ciencia cierta qué esperar. El estreno del compuesto superblando tiene nervioso a más de uno, pues si hasta los duros de Pirelli se degradan rápido… Aunque, en realidad, el asfalto de Mónaco no es muy abrasivo y la marca italiana ha apuntado la posibilidad de que solo sean necesarias dos paradas. Quizá la mayor preocupación para los equipos sea la probabilidad de que sus coches se reincorporen a la pista en medio del tráfico después de las paradas en un circuito en el que, incluso aunque esta vez adelantar sea más factible, desde luego no va a resultar fácil. Los estrategas van a tener que trabajar a destajo.

-¿Se puede detener a los Red Bull? No cabe duda de que Sebastian Vettel es el favorito número uno. Ya en 2010, los coches azules dominaron claramente tras, como este año, hacer lo propio en España. Claro que entonces fue con Mark Webber que, de momento, está siendo incapaz de hacer frente a su compañero. Para el australiano, este fin de semana puede ser clave; necesita un golpe de autoridad si es que quiere equilibrar la balanza en el seno del equipo. Esperanza para los rivales: el mejor as en la manga de Red Bull es su apoyo aerodinámico a alta velocidad, que en Montecarlo tiene mucho menor importancia. No quiere decir que el RB7 no vaya a ser capaz de ganar, pero sí que sus rivales, McLaren y Ferrari, tienen más motivos para creer en sus posibilidades. Los británicos dieron un enorme paso adelante en Montmeló, al menos en ritmo de carrera, y tienen en Lewis Hamilton a un piloto que se desenvuelve como pez en el agua en Montecarlo. Y no hay que subestimar a Button, que también sabe lo que es ganar en el Principado y cuya conocida capacidad para cuidar de los neumáticos puede ser una baza ganadora.

-¿Qué Ferrari se verá en Mónaco? Tras la decepción de Montmeló, la escudería italiana y Fernando Alonso llegan con la necesidad de, como ha señalado el español, “disponer inmediatamente de un coche más rápido si queremos pelear por el campeonato”. La esperanza es que los problemas que sufrieron en España para calentar el compuesto más duro hayan sido una anomalía y que no se repitan en Mónaco, donde entran en acción los más blandos de la gama. Hay que recordar que, en 2010, el Ferrari, en manos de Alonso, fue muy competitivo en Montecarlo después de no haberlo sido en España, y el asturiano habría podido luchar por la victoria de no haber mediado el accidente en los libres que le llevó a salir el último. “Este es un circuito totalmente diferente, la aerodinámica es quizá menos importante y siempre se ve alguna sorpresa, así que espero tener un buen fin de semana y sumar muchos puntos”, señala Fernando, que sigue insistiendo en que queda mucho por delante. “Nadie puede decir adiós después de cinco carreras; debemos tener confianza en que podemos mejorar la situación”, ha asegurado.

-¿Dará la sorpresa Renault? Mónaco no es para nada ajeno a lo inesperado. Sin ir más lejos, el año pasado nadie esperaba ver al Renault de Robert Kubica en primera fila, y el polaco podría incluso haber ganado de haber hecho una mejor salida. El equipo ha asegurado que confía en sus posibilidades de luchar por la victoria gracias a un coche que, en el lento tercer sector de Montmeló, marcó muy buenos tiempos. La cuestión será comprobar si Nick Heidfeld y Vitaly Petrov están en condiciones de explotarlo tan bien como Kubica hizo en 2010.

-El coche de seguridad. Todavía no ha aparecido este año, pero en Mónaco lo ha hecho en cinco de las seis últimas ediciones, y solo en 2010 salió hasta cuatro veces. Su irrupción en la pista está casi cantada y puede causar vuelcos inesperados. Como el de 2008: Hamilton chocó con las barreras y el obligado paso por boxes pareció descartarle, pero al salir el safety car poco después se encontró en la mejor posición para acabar ganando la carrera.

-Ocasión para los modestos: en estos tiempos de fiabilidad casi a prueba de bomba, cuando los abandonos por causas mecánicas son contados, Mónaco es una excepción. Puede que la distancia a recorrer sea la menor del año, pero para la mecánica es tal vez la prueba más dura. Y eso sin contar con la alta probabilidad de incidentes. Sin ir más lejos, el año pasado hubo nueve abandonos, muy por encima de la media. Esto quiere decir que las escuderías más modestas están ante, quizá, su mejor ocasión de todo el año. Si consiguen eludir las trampas del Principado y llevar sus coches a la meta, sus probabilidades de puntuar serán bastante más altas de lo normal. Incluso rozar el top ten puede ser muy valioso. De momento, la décima plaza en Constructores –que supone buenos ingresos- está en poder de Lotus gracias a un decimotercer puesto. Si como, en 2010, ni Lotus, ni Hispania, ni Virgin consiguen puntuar en todo el año, mejorar esa posición en Mónaco podría valer su peso en oro.

Previo del Gran Premio de Mónaco

-Zona de activación del alerón trasero en carrera: el punto de detección estará ubicado justo antes de última curva, Anthony Nogues. La zona de activación comprende la recta de meta hasta la frenada de la curva Sainte Devote. En principio, es un tramo demasiado corto, además de estrecho para pensar en que el sistema vaya a resultar efectivo de no mediar una gran diferencia en el estado de los neumáticos. Hay que recordar que su uso está permitido a partir de la tercera vuelta después de la salida o la retirada del coche de seguridad, siempre que el piloto haya pasado a menos de un segundo del coche que le precede por el punto de detección. Por otro lado, por cuestiones de seguridad, la FIA ha decidido que, en los libres y la calificación, el sistema no podrá activarse en el tramo del túnel.

-Compuestos de neumáticos: superblando (logos rojos) y blando (logos amarillos con banda dorada en los flancos). El primero hace su debut en esta carrera. Pirelli ha señalado que su rendimiento óptimo apenas da para una vuelta y que no debería ir más allá de las diez antes de venirse abajo por completo. Incluso menos al principio de la carrera, con el depósito aún lleno. Por otro lado, hay que recordar que, si en algún momento del Gran Premio es necesario montar neumáticos de lluvia, ya no habrá obligación de usar al menos un juego de cada uno de los compuestos de seco.

Los mejores en Mónaco

El recordado Ayrton Senna es el poseedor del récord de victorias en el Principado. De los pilotos en activo, Michael Schumacher es el que más veces ha recibido el trofeo de ganador de manos del príncipe, en su caso, de Rainiero, pues su último triunfo data de 2001. Cinco triunfos logró también Graham Hill, por eso conocido como Mr. Monaco. Al margen de Schumacher, el único piloto de la actual parrilla que ha ganado más de una vez es Fernando Alonso.

-Pilotos en activo que han ganado en Montecarlo:

Michael Schumacher, cinco victorias (1994, 1995, 1997, 1999, 2001); Fernando Alonso, dos (2006, 2007); Jarno Trulli, una (2004); Lewis Hamilton, una (2008); Jenson Button, una (2009); Mark Webber, una (2010).

-Equipos de la actual parrilla que han ganado en Montecarlo:

McLaren, 15 victorias (1984-86, 1988-1993, 1998, 2000, 2002, 2005, 2007, 2008); Ferrari, ocho (1955, 1975, 1976, 1979, 1981, 1997, 1999, 2001); Renault, cuatro (1994, 1995 -como Benetton-, 2004, 2006); Williams, tres (1980, 1983, 2003); Mercedes, una (2009, como Brawn); Red Bull, una (2010).

Los récords del circuito

-De la distancia: Fernando Alonso (2007, McLaren), 1h:40:29.329

-De la pole: Mark Webber (2010, Red Bull), 1:13.826

-De la vuelta rápida: Michael Schumacher (2004, Ferrari), 1:14.439


Momentos para el recuerdo

1955: dominan los Mercedes de Juan Manuel Fangio y Stirling Moss, pero ambos sufren problemas. El nuevo líder, Alberto Ascari, se estrella en la chicane y se precipita al mar (sobrevive, pero cuatro días más tarde fallece durante un test). El sorprendente vencedor es el Ferrari de Maurice Trintignant.

1965: tal vez la mejor victoria de Graham Hill, que después de perder medio minuto al evitar un coche más lento cuando es líder remonta desde la quinta plaza.

1970: uno de los finales más recordados. La carrera es un duelo entre Jack Brabham y Jochen Rindt que culmina cuando Black Jack comete un error en la última curva de la última vuelta y entrega la victoria al futuro campeón de ese año.

1981: con un Ferrari turbo nada adaptado al circuito, Gilles Villeneuve da una auténtica exhibición al calificarse en primera línea (su compañero, Didier Pironi, es decimoséptimo). El canadiense logra su penúltima victoria al estrellarse el primer líder, Nelson Piquet, y al sufrir un problema técnico Alan Jones.

1982: uno de los finales más locos de la Historia. El líder, Alain Prost, se estrella a poco del final al salir de la chicane. Uno a uno, varios pilotos en condiciones de ganar (Andrea de Cesaris, Didier Pironi, Ricardo Patrese, Derek Daly) abandonan o sufren problemas y al final es Patrese, tras recuperarse de un trompo en la horquilla de Loews el que cruza primero la meta sin siquiera sospechar que ha ganado.

1984: el salto a la fama de Ayrton Senna. Bajo la lluvia, con un Toleman poco competitivo, el brasileño recupera terreno al líder, Alain Prost, hasta que, en una polémica decisión, el director de carrera decide detenerla antes de llegar a cubrir la mitad de la distancia. Irónicamente, Prost perderá el título por medio punto: habría sido suyo si la carrera hubiera durado algo más, aunque hubiera sido segundo o incluso tercero.

1992: Nigel Mansell se encamina hacia la victoria cuando un pitstop no previsto le relega a la segunda posición, por detrás de Senna. El inglés se recupera pero, aunque su Williams es muy superior, es incapaz de hallar un hueco para sobrepasar al brasileño.

1996: una de las mayores sorpresas de la Historia del Mundial. En una carrera loca, en la que solo tres coches se mantienen en la pista al caer la bandera de cuadros, Olivier Panis consigue su único triunfo (y el último de la escudería Ligier) tras haber salido desde la séptima línea.

2006: Fernando Alonso se impone con autoridad, pero esta edición es recordada también por la travesura de Michael Schumacher, que, en la calificación, finge un error y aparca su Ferrari para impedir que el español –que, por detrás, viene mejorando- le arrebate la pole.

Horarios

Libres 1: jueves, 10.00

Libres 2: jueves, 14.00

Libres 3: sábado, 11.00

Calificación: sábado, 14.00

Carrera: domingo, 14.00 (78 vueltas, 260,520 km).

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