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Seat Ibiza Cupra 2013, una bomba de 180 CV y DSG

Jorge Arenas

El Seat Ibiza Cupra 2013 llega al mercado en febrero del año que viene con el 1.4 TSI de 180 CV bajo el capó. Asociado a la carrocería de tres puertas, solo se puede elegir con cambio DSG. Más deportivo y exclusivo que cualquier otro Ibiza, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos.

Ya conocemos los primeros datos del Seat Ibiza Cupra 2013, que se convertirá en la versión más deportiva de la gama cuando llegue al mercado en febrero del año que viene. Bajo el capó esconde el motor 1.4 TSI que, gracias al sistema de inyección directa y a la sobrealimentación combinada por turbo y compresor, desarrolla 180 CV de potencia y 250 Nm de par motor. Las prestaciones están a la altura: alcanza los 100 km/h desde parado en 6,9 segundos y su velocidad punta es de 228 km/h. Pero lo más llamativo es que estas cifras van unidas a un consumo muy contenido, de 5,9 l/100 km. La caja de cambios automática de doble embrague DSG ayuda a sacar el máximo partido al motor y a contener el gasto de combustible de este Seat.

El comportamiento dinámico queda marcado por la personalidad de un chasis más firme y de altura rebajada, al que se unen un sistema de frenos más potente que el de cualquier otro Ibiza (además, hay un equipo AP Racing Performance en el catálogo de opciones) y el diferencial electrónico XDS, que mejora la tracción de forma notable en el paso por curva. Sin duda, se plantea como el perfecto rival del Volkswagen Polo GTI.

Seat Ibiza Cupra 2013

Dentro del listado de equipamiento exclusivo destaca el SEAT Portable System, que combina el navegador con el sistema de manos libres por Bluetooth, con algunas funciones adicionales para manejar el equipo de sonido. Cuenta con una pantalla de cinco pulgadas y, a partir del año próximo, ofrecerá funciones como la conectividad online vía smartphone. 

Las llantas de 17 pulgadas marcan el aspecto exterior del Seat Ibiza Cupra 2013, pero no solo eso. También la nueva parrilla o los faros bixenón con LED's se integran en el frontal de manera que acentúan su anchura y le dan un aspecto más agresivo. Los antiniebla delanteros, por su parte, cuentan con función cornering. La zaga se distingue por el musculoso paragolpes que enmarca el difusor y la salida de escape trapezoidal. También los pilotos cuentan con diodos LED.

En el interior continúa ese toque deportivo con la llegada de un volante rediseñado, nuevas levas para hacer más cómodo el cambio de marchas, asientos envolventes y una tapicería bicolor. Elementos, todos ellos, que se encargan de dejar claro que este es el Ibiza tope de gama.

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