Rinspeed Budii, un BMW i3 autónomo para el Salón de Ginebra
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Como es tradición, en los días previos a la apertura de puertas de la muestra suiza, Rinspeed ha hecho público el dossier completo del concepto Rinspeed Budii. Hasta este momento, además de la lista de proveedores tecnológicos que puedes ver en la web de Rinspeed, el carrocero tan sólo había comunicado sus ideas generales sobre cómo ve la conducción autónoma a medio y largo plazo con el anuncio de la presentación del concepto Budii en Ginebra 2015. “No podemos permanecer ciegos, sino más bien tener una fe ciega en las posibilidades que ofrecen los avances del hardware y del software”, afirmó Frank M. Rinderknecht.
Tras presentar en 2013, el Rinspeed sQuba, un prototipo de coche sumergible, Rinspeed parece que decidió no llevar a cabo más de estas excentricidades con las que nos llevaba alegrando la vida desde hace varias décadas. Así, en 2014, llegó el Rinspeed XchangE más un módulo intercambiador de transporte ciudadano que un coche urbano y ahora llega el Budii. Desarrollado bajo el leit motiv “amistad sobre ruedas”, de ahí el nombre Budii del prototipo, que fonéticamente suena igual que la palabra “amigo o colega” en inglés.
Así, el Rinspeed Budii será el mejor amigo del ciudadano de dentro de 15 o 20 años, un amigo que, además, no para de aprender de la experiencia para mejorar la seguridad de los desplazamientos urbanos de su propietario. Y es que la mayoría de las novedades del Rinspeed Budii no se perciben a simple vista, aunque sí hay una que me ha resultado especialmente revolucionaria. El volante del Rinspeed Buddi es retráctil gracias a que la dirección se encuentra dentro de un brazo robótico, con la capacidad para escamotear el volante cuando el conductor ya no se está haciendo cargo de él.
Pero como puedes ver en la galería de imágenes, el concepto de eléctrico de Rinspeed no sólo presenta novedades en el interior, el exterior también es radicalmente distinto al modelo en el que está basado. De esta forma, el pequeño eléctrico cuenta ahora con una carrocería considerablemente más ancha, unos paragolpes rediseñados, unos paneles luminosos multifuncionales en el frontal y en la zaga y nuevas llantas de aleación de 19 pulgadas de diámetro. Tampoco falta una suspensión neumática que permite variar la altura de la carrocería en más de 9 centímetros, todo para convertir a este prototipo en uno de los más llamativos de entre todas las novedades del Salón de Ginebra 2015.
Y si te fijas en el techo del prototipo Budii, descubrirás la presencia de un “escáner láser telescópico”. Este sistema, que hace las veces de ‘ojos’ del coche, cuenta con una cámara 3D capaz de leer e identificar el terreno y los diferentes objetos que rodean al vehículo. Para mejorar la visibilidad del sistema y aumentar su eficacia, cuenta además con un sistema telescópico que le permite elevarse hasta 70 centímetros sobre el techo del coche.
Etiquetas: Salón de Ginebra 2015
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