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5 razones para obsesionarte con un ‘muscle car’

Nacho de Haro

Si te gusta la fuerza bruta de los motores V8, el olor a gasolina y goma quemada y te van más las rectas que las curvas, entonces seguro que te atraen los poderosos ‘muscle cars’ estadounidenses. Y por si no es así, te presentamos cinco razones para obsesionarte con un ‘muscle car’.

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Aunque a día de hoy es posible incluso que un Volkswagen Golf TDI suene como un V8 gracias a la tecnología, no hay nada comparable a la sensación que proporciona conducir uno de los poderosos e icónicos ‘muscle cars’ estadounidenses. Este tipo de vehículos llevan más de 50 años ‘levantando’ el asfalto a su paso -y también, columnas de humo- gracias a sus enormes motores V8 que devoran gasolina como si nunca se fuese a acabar. Si no te gustan este tipo de coches, te recomendamos que eches un vistazo a la galería de imágenes en la que te damos cinco razones para obsesionarte con un ‘muscle car.

En cierto modo los ‘muscle cars’ representan el caso contrario al de los clásicos deportivos europeos, que suelen caracterizarse por equipar pequeños pero potentes propulsores -salvo en contadas marcas como Lamborghini o Ferrari, en la que no son precisamente de pequeña cilindrada-, por su relativa ligereza y por contar con una puesta a punto en la que prima el comportamiento en curva. Sin embargo, los ‘muscle cars’ están viviendo ahora el que probablemente sea el momento más dulce desde su aparición, con cifras de ventas que no paran de aumentar y no solo en Estados Unidos, también en España.

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