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Probamos el Audi prologue, el futuro Audi A9

Hace nada, el prototipo alemán era presentado en el Salón de Los Angeles 2014. Ahora, ya hemos tenido la oportunidad de probar el Audi prologue por las calles de Beverly Hills. Aquí tienes nuestras primeras impresiones al volante del prologue, la antesala del futuro Audi A9.

Así de rápidas pueden ser las cosas. El Audi prologue lucía palmito hace nada en el Salón de Los Angeles 2014, y ahora ya hemos podido conducirlo por las calles de Beverly Hills. Es increíble que este prototipo, entre el resto de los vehículos aparcados en el hotel, prácticamente se vea como un modelo de serie. Ha llegado el momento de probar el Audi A9 Prologue, el germen del futuro Audi A9.

Basta pasar el dedo por la pantalla de mi smartphone, y la puerta se abre como por arte de magia. En el futuro, este modelo no tendrá llave alguna, sino que el coche reconocerá a su dueño por el teléfono móvil. Me introduzco con sumo cuidado, ya que el cuero que reviste los asientos es una pieza única, y está absolutamente impoluto.

Con un mando de la consola central despierto al 4,0 litros V8 de 605 CV. Borbotea brevemente, y luego queda de nuevo en silencio. En la pantalla que hay tras el volante veo la futura generación del MMI, con animación en 3D. A diferencia del Audi TT actual, comparte la información con el copiloto: sobre la alargada pantalla que reviste la guantera, se puede programar una ruta o elegir la música, por ejemplo. 

Por delante de la palanca del cambio Tiptronic de ocho velocidades encuentro una pantalla OLED táctil. Una novedad mundial, ya que es flexible, y permite usar funciones como el climatizador, la calefacción de los asientos, el reparto de la ventilación o los dispositivos multimedia con simples gestos de los dedos, mientras la muñeca descansa en el pomo de la palanca. Presiono el botón “D” con la yema del dedo. ¡En marcha!

Toca probar el Audi prologue: en cuanto piso el acelerador se me erizan los pelos de la nuca. ¡Qué sonido! Quien diga que los 'muscle-cars' solo vienen de América debería meterse aquí dentro ahora mismo. No puedo pisar a fondo, claro, y es que esta vuelta por las calles de Beverly Hills solo ha sido posible escoltado por un par de policías. Por eso, tampoco he podido probar bien la eficacia de la tracción integral.

Pero al menos he podido conducir el coche por encima de los 25 km/h, algo impensable en otros prototipos. Y es que este futuro A9 se siente como un coche de serie: nada cruje en el puesto de conducción, algo que debo agradecer en gran parte a la suspensión neumática. El salpicadero, los mandos y la palanca transmiten la típica solidez Audi y permanecen en su sitio, inamovibles. Solo un respuesta algo retardada al pedal del gas denota que este modelo aún está a un paso de ser un coche de serie. Un paso muy pequeño, eso sí.
Y es que bajo la bella carrocería del prologue no se esconde, como muchos piensan, la plataforma del actual Audi A8, sino la de la siguiente generación que aparecerá a finales de 2015. Del prologue surgirá el A9 que podría aparecer en 2017 no solo como dos puertas coupé, sino también como Sportback de cuatro puertas. Hasta entonces, puedo decir que yo ya he probado al Audi prologue.

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