La evolución del diseño en KIA: ¡el salto del tigre!

Quién no recuerda aquel anuncio de televisión en el que el actor Antonio Resines presentaba el Kia Shuma, un modelo de aspecto cuando menos discreto... ¡por no decir excesivamente asiático!
Estamos hablando de finales de los años 90 del siglo XX, aunque parece que fue hace 100 años, sobre todo si tenemos en cuenta lo que es Kia hoy en día; no sólo por el salto de calidad experimentado, sino también porque a nivel de diseño la marca coreana se ha convertido en una de las más atractivas. Es una trayectoria calcada –de menos a más– a la que ha experimentado uno de los embajadores más icónicos de Kia: el tenista Rafa Nadal.
El punto inflexión en Kia se produjo en 2006, una vez que el renombrado diseñador Peter Schreyer –padre entre otros muchos éxitos automovilísticos del Audi A2 y TT y el Volkswagen New Beetle, Passat y Golf IV– fue fichado como director de Diseño para que le cambiara la cara a sus modelos… con suma prisa.

La primera tarea de Schreyer era conseguir un nuevo diseño de marca que permitiera que cualquier Kia fuera identificable cuando se le viera sobre el asfalto. Y es que hay que tener en cuenta que hasta entonces la imagen de sus modelos era muy neutral… Tanto que, según estudios de mercado de la época, quien veía un Kia por la calle no sabía si se trataba de un coche japonés o coreano. Con el firme objetivo de solucionar de raíz este problema, Schreyer se marcó la meta de lograr un diseño por el que cualquiera identificara un Kia de un solo vistazo.
La solución a esta crisis de identidad llegó con la conocida Tiger Nose (nariz de tigre, en inglés). “Estaba buscando una imagen de familia que centrara a los modelos y que era única al mismo tiempo y que, en cualquier caso fuera variable de un modelo a otro, cuando de pronto surgió la chispa”, explica el propio Schreyer.
El primer modelo en estrenar la nueva parrilla de nariz de tigre (es la de esta foto) fue el concept Kee en 2007, y desde entonces fueron incorporándola el resto de la gama, desde el Cerato, pasando por el Rio y Sportage y llegando al Soul, el modelo más rompedor e icónico de la marca coreana: es un coche que no deja indiferente.

El Kia Kee, el primero en usar la 'nariz de tigre'

En este punto hay que hacer una mención especial al primer modelo de la nueva era de Kia, el cee’d, denominación que hace referencia a la CEE (Comunidad Económica Europea), por ser el primero en ser diseñado y construido en Europa. Fue la simiente de la estrategia de expansión de la marca coreana por el Viejo Continente. Esta semilla estaba basada en el nuevo lenguaje de diseño concebido por Schreyer y en una apuesta firme por la calidad percibida. Todo ello permitió el espectacular salto de clase e imagen del que ahora disfrutan todos los Kia, y que vino acompañado de decenas de premios de diseño.

El caso Kia Soul

Dentro de toda la saga de éxito de la nueva era de Kia, hay que hacer una mención especial al Soul (espíritu o alma, en inglés), el modelo más icónico de la marca coreana. Fue concebido por Mike Torpey en el Centro de Diseño de Kia en California (EEUU). Torpey, fascinado por un documental de facóqueros (jabalíes salvajes), se inspiró en ese animal para el primer esbozo del Soul, el cual recibió retoques por parte de Schreyer. Fue presentado en el Salón de París en 2008 y desde entonces no dejó indiferente a nadie, sobre todo a la comunidad de diseñadores. Tanto, que el Soul ha sido distinguido con premios tan prestigiosos como el IF o el Red Dot. Un espaldarazo a un trabajo muy innovador.