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Oporto: escapada de un fin de semana

Si buscas una escapada de fin de semana, nuestros vecinos pueden ser la solución. En la ribera del Duero, Oporto es una ciudad mágica, que esconde rincones congelados en el tiempo, y de esas ciudades que enamoran, por sus puentes y monumentos, azulejos, balcones floridos y calles comerciales. ¿Nos acompañas?

Ciudad acogedora y mágica, Oporto es una opción ideal para una escapada de fin de semana. En tan solo dos días, podrás empaparte de su magia, disfrutar de sus calles y desconectar del día a día. Eso sí, has de tener mu claro qué ver en Oporto en un fin de semana.

La estación de Sao Bento, con su vestíbulo revestido de azulejos, es el lugar ideal para iniciar el recorrido. Un poco más adelante está la catedral, desde cuyo atrio podrás disfrutar de la primera panorámica del Duero, de las casas y de la otra orilla. Desde allí, si bajas por escaleras te adentrarás por las calles medievales hasta Ribeira. Merece la pena quedarte aquí un rato para respirar el ambiente. Después, te espera el interior dorado de la Iglesia de San Francisco. Crca hay más iglesias y monumentos, azulejos en las fachadas y el Palacio de la Bolsa.

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Saliendo desde el río, el tranvía realiza un recorrido que llega hasta Foz, donde podrá hacer un paseo y llenarse los pulmones con la brisa del mar. Allí empieza la Avenida da Boavista. No muy lejos queda Serralves, con jardines para pasear o descansar, y exposiciones de arte contemporáneo. 

Y, por supuesto, no te olvides de visitar las bodegas del vino de Oporto (del lado de Gaia), Patrimonio Mundial. Están en el centro histórico de Oporto y en la orilla del río Duero 

Oporto en un fin de semana: imprescindible

- Visitar la Casa do Infante, junto a Ribeira.

- Admirar el casco antiguo de Miragaia, muy cerca del muelle de Ribeira.

- De día o de noche, pasear por la Rua Galería de París y por las calles adyacentes, cerca de la Torre de los Clérigos.

- Dar una vuelta por la Rua Miguel Bombarda para deleitarse con su diseño y el arte contemporáneo.

- Pasear por el Parque de la Ciudad, frente al mar.

- Disfrutar de las terrazas de la desembocadura del río.

- Probar el sandwich 'francesinha', una de las especialidades de Oporto

- Probar el pescado fresco y el marisco, o los 'bolinhos' (buñuelos) de bacalao.

- Conocer un poco del litoral al norte o al sur de Oporto.

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