Comportamiento en ciudad y carreteras convencionales

En un principio, la publicación de hoy estaba dedicada al comportamiento del coche en carretera de montaña, pero debido a la importancia y diferencia de estas calzadas respecto a las demás, he decidido finalmente hacerlo el próximo viernes. Así podré analizar los aspectos con mayor exactitud, ya que es el entorno donde la combinación coche/motor marcan la diferencia.

Siguiendo con el tema de hoy, voy a centrarme en ambos tipos de entornos de conducción. Cuando nos adentramos en ciudad con el nuevo Ford Focus, tal vez encontramos un punto débil a este estupendo vehículo: el consumo aumenta considerablemente. Aunque este es un tema que trataré en próximas publicaciones con más exactitud, puedo anticipar que no es su lugar propicio. Este coche pide a su conductor carretera, kilómetros y kilómetros de calzada: ahí es donde se siente cómodo el motor EcoBoost y donde despliega sus eficientes 125 CV de potencia.

Al margen de este pequeño detalle, el comportamiento general del vehículo es sobresaliente. Destacan las ayudas que hacen todo más fácil, especialmente el sistema HLA, que evita la caída del coche hacia atrás cuando realizas una parada en cuesta. Funciona de tal forma que, cuando levantamos el pie del pedal de freno para continuar la marcha, el vehículo queda frenado unos segundos hasta que reanudemos la marcha.

Una vez en carreteras convencionales, caracterizadas por largas rectas y algunas curvas que tienen, en su mayoría, un amplio radio, la estabilidad y aplomo del vehículo son elementos indispensables para conseguir una conducción más segura. En este apartado, el nuevo Ford Focus se muestra como pez en el agua. Gracias a su anchura transmite sensación de seguridad. Asimismo, sus neumáticos –equipados con llantas de 17 pulgadas- y el aplome del tren delantero hacen que la conducción a través de estas vías sea una delicia. Ayuda a ello el potente motor de 125 CV, sobre todo en desniveles y a la hora de realizar adelantamientos, donde contamos con esa respuesta instantánea y sobresaliente.

En el post de este viernes os contaré más sobre el comportamiento del Ford Focus, que por primera vez pondrá a prueba su pequeño motor 1.0 en un entorno donde la respuesta y potencia son elementos necesarios para una conducción fluida.

¡Gracias a todos los lectores y hasta el viernes!