29 de diciembre… ¡Esto se acaba! Como todos los años, suelo hacer una pequeña reflexión sobre los coches que más me ha gustado probar (que no tiene por qué ser conducir). A los que tenemos alma de probador nos gusta eso, estar subido todos los días en coches diferentes, de todo tipo potencias o carrocerías. No te engaño si te digo que en 2011 he podido examinar durante más de 700 km unos 60 coches. ¿Solo conducir?¿150?¿200? Ni yo mismo te podría dar una respuesta.
Pues bien, emulando al gran Crispín Jander Clander te presento los cinco coches de 2011 que más me ha gustado conducir. Es una opinión muy personal, tampoco son los mejores que he testado y, alguno que otro, ni se me pasaría por la cabeza comprármelo. ¡Así que..!
Cuesta demasiado dinero (42.900 euros), pero el Ampera merece estar aquí por el esfuerzo que han realizado en Opel en pro de la movilidad sostenible. Sin duda, es un paso más hacia la electrificación del automóvil y en unos años lo recordaremos con cariño. No me lo compraría.
Pronto tendrás más noticias de él, pero es un coche me ha dejado impresionado por la capacidad rutera que te ofrece. He llegado a recorrer más de 1.250 kilómetros con un solo depósito a una velocidad mantenida de 125 km/h por autovía. No te enamora ni por su comportamiento, ni estética ni prestaciones, pero rondar siempre un consumo medio de 5,2 l/100 km tiene su mérito. Tendría uno en mi garaje siempre que tuviera que viajar mucho.
A primeros de año me pasé toda una mañana dándole a la rosca en el circuito de Can Padró (es lo más cercano que hay cortado al tráfico a una carretera de montaña). Me dejó destrozada la rodilla derecha de rozarme con el túnel de la transmisión, el habitáculo es caluroso (en invierno fenomenal!) y tiene el honor de ser el coche más incómodo que he conducido. Pero me encanta, en el todo es muy directo y nadie te da tantas sensaciones. ¿Lo compraría? No, es demasiado heavy. Otra cosa es si tuviera una pista como Can Padró cerca de casa…
Así, sin paños calientes: es el mejor coche del mundo para derrapar. Con 680 Nm a 1.500 rpm tiene tanta fuerza como para arrancar (sí, sinónimo de destrozar) el asfalto. Lo probé en el circuito de Ascari, el día era precioso y la zaga del M5 se movía en las curvas rápidas a 140 km/h en tercera. ¡Ufff! Lógicamente, en todas curvas de segunda (más despacito!) le cruzada era preciosa. Pero, no me lo compraría. Busco algo más ligero y con un 530d tengo más suficiente para viajar.
En primer lugar… Porsche Cayman R
Es perfecto, equilibrado, ligero, deportivo, sable a diario, con motor atmosférico, con la potencia justa y necesaria (330 CV) para pasártelo como un niño pequeño… Sí, como puedes leer, babeo por el Porsche Cayman R. Su reparto de pesos es excelente, tiene tacto a coche de carreras y dinámicamente es muy superior al 911 (lo siento amigo Luis). El mayor problema al que se enfrenta es que no se llama nueveonce. Sin duda, este coche me lo compraría con los ojos cerrados. En fin, tendré que pedírselo a los Reyes Magos.
Feliz Año Nuevo! Q el 2012 nos traiga tantas emociones como el 2011!!
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